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lunes, 17 de diciembre de 2012

QUÉ PENA AJENA, VENEZUELA

Gustavo Coronel
Sábado 15/12/212


Esto fue escrito por el autor el día antes de las elecciones.

Me aterra ver como ha cambiado Venezuela en estos años. Es un país que difiere mucho del que conocí y en el cual pasé la mayor parte de mi vida. Me refiero, especificamente, a la manera como ha cambiado la actitud del venezolano ante asuntos tan vitales como el tipo de gobierno, la calidad del liderazgo,  sus deseos de superación, su nivel de tolerancia frente al crimen y su lenguaje. En todos esos aspectos el país y sus gentes han sufrido, a mi manera de ver, un deterioro espeluznante. Hasta el punto de que ya no puedo sentir orgullo por mi gentilicio sino una profunda decepción.


Reflexión dominical, no apta para resignados
Triste reflexión es esta pero una que debo hacer, en aras de la honestidad con la cual debemos  actuar en esta época de oscurantismo. Afortunadamente, no creo que esta sea una situación irreversible. Otros pueblos han tenido similares momentos de involución espiritual y han logrado revertirla. Quien lea la historia de Inglaterra o de Francia encontrará claras oscilaciones  entre momentos de esplendor y de ruina espiritual. Hay esperanzas.

Pero hoy Venezuela se encuentra en un profundo foso. Leo como venezolanos que se dicen demócratas están promoviendo acercamientos, diálogos, reconciliaciones con una pandilla de malandros que ha destruído al país. Algunos de ellos, como Edgar Zambrano, representante de un partido que libró hermosas batallas por la libertad y la democracia, suenan ya, casi, como voceros del régimen. Aun entre los mejores oigo y observo una cierta resignación, un cierto nivel de acomodo que me repele profundamente. Se comienza a hablar elogiosamente del “sucesor”. Se toma partido entre Cabello y Maduro, como quien va al Caracas o al Magallanes. Se habla de una transición organizada, llena de paz, lo que los estadounidenses definen como  “amor y torta de manzana” Nuestra situación colectiva me recuerda el terrible poema de William Butler Yeats, “The second coming”:

Turning and turning in the widening gyre
The falcon cannot hear the falconer;
Things fall apart; the centre cannot hold;
Mere anarchy is loosed upon the world,
The blood-dimmed tide is loosed, and everywhere
The ceremony of innocence is drowned;
The best lack all conviction, while the worst
Are full of passionate intensity.

Una traducción a la carrera:

Dando vueltas en la creciente espiral
El halcón no escucha al halconero
Las cosas se disgregan, el centro no resiste
Una mera anarquía se desata en el mundo,
una marea sangrienta inunda y en todo alrededor
la ceremonia de la inocencia muere
los mejores carecen de convicción
mientras los peores están llenos
de una apasionada intensidad.

Esta terrible situación indica una entrega de principios y valores que constituyen el preludio de la anomia.

La calidad del liderazgo comienza a ser juzgada con la óptica de las expectativas mínimas. Maduro no parece tan malo, parece más asequible, un buen muchacho, a lo mejor lo hace bien, hay que darle su chancecito. No hay criterios de excelencia en la mente de mis compatriotas tanto como relatividades que empobrecen.

En esa misma línea de las expectativas decrecientes observo como nuestro pueblo parece haber abandonado, en alarmante medida, sus tradicionales deseos de superación. En mi pueblo de Los Teques todos éramos clase media o baja y todos, que recuerde, salimos a la vida a superarnos. Nos convertimos en ambientalistas, periodistas, economistas, geólogos, poetas, farmaceúticos. Nadie quería quedarse atrás. Hoy veo muchas colas de gente resignada que esperan por un pote de leche, por el kilo de papas subsidiadas. Veo mucha dependencia, pocos rebeldes. No hablo de héroes porque no es lícito pedirle a nadie que lo sea. El heroismo es una actitud extrema. Pero si pienso razonable esperar de mi pueblo una actitud colectiva hacia la superación, la cual no veo hoy predominar (Advertencia: toda apreciación sobre el colectivo es por fuerza relativa. Hay millones de venezolanos quienes conservan el deseo de superación, hablo de una tendencia al abandono de esos deseos).

Apenas ayer me decía un lúcido amigo que los venezolanos habíamos perdido nuestra capacidad de indignación. Nos asaltan, violan a nuestras mujeres, secuestran a nuestros hijos, confiscan nuestras empresas, limitan nuestros movimientos, nos hacen interrogar por cubanos, oímos hablar chino y vietnamita en la faja del Orinoco. Y hasta le damos las gracias a los secuestradores porque fuímos razonablemnte bien tratados, porue no perdimos la vida.   

Y que decir del lenguaje, de nuestras manifestaciones culturales, de nuestra manera de comportarnos en sociedad? Decía Wittgenstein que los límites de nuestro lenguaje representaban los límites de nuestro mundo. Uno oía hablar a Uslar Pietri y podia tener una clara vision del inmenso mundo de aquel hombre. Al oir hablar a Iris Varela, a Hugo Chávez o a Nicolás Maduro solo podemos imaginarnos un oscuro y estrecho mundillo, habitado por homínidos, aun en etapas tempranas de evolución hacia el homo sapiens.

En la Venezuela de nuestros día Rosita incursiona en la política, Lila Morillo admira a…. Lila Morillo, Diosa Canales ocupa gran centimetraje en nuestras publicaciones, Pastor Maldonado piensa que el país debe estar orgulloso de su papelón.  

Vendrán mejores tiempos. Pero para muchos será demasiado tarde.




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miércoles, 21 de noviembre de 2012

¿EL LIDERAZGO RELIGIOSO DE HUGO CHAVEZ?


Ana Teresa Torres


"Dame tu corona, Cristo, dámela, que yo sangro, dame tu cruz, cien cruces, pero dame vida, porque todavía me quedan cosas por hacer por este pueblo y por esta patria, no me lleves todavía, dame tu cruz, dame tus espinas, dame tu sable que yo estoy dispuesto a llevarlas, pero con vida, Cristo, mi señor."
Estas palabras fueron pronunciadas por Hugo Chávez en una misa de acción de gracias en Barinas, a su regreso de Cuba en abril de 2012, a donde había viajado para continuar su tratamiento. Cristo aparece en este discurso con un sable, lo que tampoco corresponde al cristianismo típico. Es un Cristo guerrero. El sable simbólicamente pertenece a Bolívar, y de ese modo se mezclan ambas figuras en un solo conjunto de significados. El líder se presenta entonces en identificación con el Cristo sufriente, el Cristo redentor que asumió el sacrificio y tormento para salvar a los hombres, pero que al mismo tiempo es un guerrero, que inspira la lucha por el pueblo. De la misma manera en que el socialismo real fue ateo, el Cristo del cristianismo no es guerrero, pero estas contradicciones son obviadas en el discurso, que de algún modo contiene reminiscencias tergiversadas del movimiento de la teología de la liberación.
    Hay una división de opiniones acerca de si el liderazgo de Hugo Chávez es político, carismático o religioso. No veo oposiciones infranqueables entre ellas. Es todo a la vez. Un liderazgo mantenido por catorce años invita a preguntarnos de qué fuentes surge el poder del líder para sostener la fidelidad de la masa durante tanto tiempo y a pesar de la precaria gestión de gobierno. Hay dos fuentes que saltan a primera vista y en las que no me voy a detener porque son las que constantemente son citadas y referenciadas por todo tipo de opinadores: el poder económico y el poder político. No hay mucho que agregar sobre esto porque es obvio. Si partimos de la definición de que las masas siguen a Hugo Chávez porque les brinda (o promete brindar) apoyo directo a sus necesidades básicas, que son prioritarias en sectores pobres o pobrísimos de la sociedad, y continuamos con la definición de que esas masas están controladas por un poder político sin barreras ni cortapisas, estaremos, sin duda, diciendo algo cierto y evidente. Pero si eso es lo único que mantiene la fidelidad al líder, entonces tendríamos que pensar que estamos definiendo a esas masas como un conjunto de cuerpos vacíos que solamente responden a la inmediata necesidad y al control intimidatorio de los mecanismos del poder. Debemos recordar que estamos hablando de personas (de muchas, por cierto) y no de máquinas a las que se les suministra combustible o se programa para actuar; y en términos religiosos –que es precisamente el tema que nos convoca–, bien pudiéramos decir que son cuerpos con alma. En ese movedizo terreno de la subjetividad se ancla la tercera fuente de poder del líder: el poder simbólico.
 
¿En qué se asienta este poder? ¿Cómo se expresa? Los efectos son intangibles, pero su vehículo es perfectamente visible y asible: en el discurso. En las palabras. En los instrumentos simbólicos que disponemos para construir nuestra identidad. Los seres humanos nos construimos y definimos en la palabra del otro, eso, al menos, piensa un psicoanalista. El lenguaje nos afecta y es el instrumento fundamental que nos constituye en personas. Entonces estamos obligados a pensar en la consistencia y naturaleza de ese discurso constituyente que ha logrado en tres lustros convertir a las masas, que durante cuatro décadas suponíamos democráticas, en fieles seguidores de una ideología no democrática, autoritaria, y encaminada día a día hacia el totalitarismo a la venezolana. Es tarea de los politólogos definir las características de esa ideología, de esa construcción política que ha creado Hugo Chávez, y que tiene cualidades muy particulares que no se dejan fácilmente asimilar a las ideologías estándar estudiadas por las teorías políticas. No soy politóloga, así que les invito a pensar en el fenómeno desde otros canales. ¿De qué está hecho el discurso de Hugo Chávez? Si corremos a definirlo como una sarta de palabrería sin sentido, una habladera de pistoladas, como se dice en criollo, no podemos continuar. El prejuicio nos impide comprender. Les invito a desprenderse de ese prejuicio según el cual el discurso de Chávez es pura cháchara. O en todo caso, a admitir que es necesario tratar de comprender mejor esa cháchara. No es una retórica hueca destinada a marear a los escuchas, tiene sentido y puede ser comprendida.
Si levantamos la hojarasca de su verbo encendido podemos distinguir que el discurso tiene dos vértices básicos: por un lado es un discurso histórico-nacionalista-bolivariano, y por el otro un discurso redentorista-cristiano-socialista. Hay que hacer una salvedad, y es que en ninguno de los casos el discurso corresponde palabra por palabra a la base teórica de la que proviene. Es un discurso compuesto de apropiaciones y reapropiaciones de discursos “mayores”, hasta cierto punto universales, pero crea un nuevo producto, único y solo parecido a sí mismo. Este discurso ha construido una versión histórica de Venezuela, que no hace falta que avalen los historiadores; la veracidad histórica no tiene importancia a los fines de la retórica política. Es la historia de Venezuela, tal como el líder la entiende y como la recibe la masa. Tiene efecto simbólico en tanto es un gran relato nacional cuyo protagonista es el pueblo oprimido y engañado por las elites durante cinco siglos que finalmente encuentra su liberación. Simple, poco veraz, pero efectivo. Otro tanto puede decirse de lo bolivariano que habla del Libertador, tal como el líder lo ha construido –imagen en 3D incluida–; y digan lo que digan los historiadores, ese Bolívar, tergiversado o inventado, es el que recibe la masa. Un nuevo Bolívar cristiano y socialista, que opera como la bisagra que une los dos vértices, el histórico-nacionalista y el redentorista; a lo que hay que agregar que Bolívar ya recibía cualidades religiosas antes de Chávez, de modo que aquí el líder se apropia de un discurso prefabricado. Quien es chavista es también bolivariano, socialista y cristiano. O al revés. Los conceptos se intercambian y se hacen sinónimos, a pesar de las contradicciones que puedan contener. Es un conjunto de significantes que flota en el discurso y que cada receptor capta de acuerdo a su propia subjetividad.
Con el discurso cristiano ocurre lo mismo que con el discurso histórico. No es el discurso de un teólogo jesuita, es la apropiación de lo que Michaelle Ascencio ha estudiado como “catolicismo popular”,  y no corresponde por completo a la religión católica de los dogmas y practicas religiosas, al punto que incluye fácilmente creencias y prácticas mágicas provenientes de otras creencias, y tampoco establece una diferencia taxativa con las religiones cristianas protestantes, que en América Latina son conocidas como evangélicas. Es un discurso religioso lo suficientemente amplio para que cualquiera puede encontrarse cómodo dentro de sus referencias. Un ejemplo: “Estoy seguro de que lo vamos a lograr. Hemos sido bañados por el agua bendita del cordonazo de San Francisco. Hoy es día de San Francisco, aquel que era rico y entregó toda su riqueza a los pobres y se volvió santo”. Estas afirmaciones dichas en el cierre de la campaña electoral pasada unen la tradición caraqueña del culto a San Francisco con el milagro y el éxito político.
En cuanto al discurso socialista, derivado del marxismo, que el líder comenzó a hacer explícito hacia la mitad de su mandato, ocurre lo mismo. Un teórico marxista o neomarxista no quedaría suficientemente convencido. Es un marxismo reapropiado. Por poner un ejemplo, si bien el estado comunal, y la propia idea de la comuna, se inspiran en los soviets y en los kolhos de la Unión Soviética, no se propone un estado soviético tal cual fue. Es una versión venezolana, más asequible a nuestra mentalidad que la que impusieron los rusos tiempo atrás, pero al fin y al cabo es una invocación del marxismo que puede contentar a los sectores de la izquierda, y al mismo tiempo ofrece la redención de los desposeídos, que puede animar a las masas. Todo, en conjunto, va creando una construcción barroca en la cual diferentes discursos universales confluyen para generar un discurso culturalmente nuevo, y que probablemente solo funciona en Venezuela porque adopta las características culturales nacionales. Es por eso que si el líder baila joropo o entona coplas llaneras en medio de un discurso, las masas no ven eso como ridículo o fuera de lugar; ni tampoco que cuente anécdotas interminables o chistes perdidos, porque recrea así la manera popular del habla venezolana.
El discurso histórico es también redentorista en tanto la historia se ha planteado como el relato de la dominación de unas clases sobre otras (lo que tiene una reminiscencia marxista, sin duda), pero dentro de la redención no esta solamente la material, que fue la propia del marxismo, sino la cristiana. Cristo es por antonomasia el redentor, y de acuerdo con el líder, el redentor de los pobres porque fue socialista. Cristo es una fuerza espiritual y también guerrera:
Dame tu corona, Cristo, dámela, que yo sangro, dame tu cruz, cien cruces, pero dame vida, porque todavía me quedan cosas por hacer por este pueblo y por esta patria, no me lleves todavía, dame tu cruz, dame tus espinas, dame tu sable que yo estoy dispuesto a llevarlas, pero con vida, Cristo, mi señor.
Estas palabras fueron pronunciadas por Hugo Chávez en una misa de acción de gracias en Barinas, a su regreso de Cuba en abril de 2012, a donde había viajado para continuar su tratamiento. Cristo aparece en este discurso con un sable, lo que tampoco corresponde al cristianismo típico. Es un Cristo guerrero. El sable simbólicamente pertenece a Bolívar, y de ese modo se mezclan ambas figuras en un solo conjunto de significados. El líder se presenta entonces en identificación con el Cristo sufriente, el Cristo redentor que asumió el sacrificio y tormento para salvar a los hombres, pero que al mismo tiempo es un guerrero, que inspira la lucha por el pueblo. De la misma manera en que el socialismo real fue ateo, el Cristo del cristianismo no es guerrero, pero estas contradicciones son obviadas en el discurso, que de algún modo contiene reminiscencias tergiversadas del movimiento de la teología de la liberación.
El líder propone a Cristo como su modelo de identificación, y al mismo tiempo se propone a sí mismo como modelo para sus seguidores. Esa identificación, además, no es estática, genera modificaciones en la propia masa. Como decía en unas recientes declaraciones Moisés Naím (El Universal, 4/11/2012): “Hay muchas características de la ideología, de la personalidad y de las preferencias de Chávez que hoy se reflejan en la nación”.
En tanto los venezolanos son los hijos e hijas de Bolívar, quedan unidos en un doble vínculo sagrado: la unión a través de Cristo y a través de Bolívar. Y más aún, la identidad del pueblo es definida a través de la identidad del líder:
Chávez no soy yo, Chávez son ustedes, somos todos. Ya no soy yo. En verdad Chávez es un pueblo, es un concepto: el chavismo.
Estas palabras corresponden a una concentración en Cumaná en la pasada campaña electoral, pero con mínimas variantes han sido repetidas numerosas veces. Por cierto que la repetición abusiva de su retórica ha sido considerada como un “fastidio”, o como propia de quien no tiene nada que decir. Veámoslo también como la consistencia que el oyente encuentra en el discurso, la seguridad de que su líder no cambia y es fiel a lo que dice; y también como la repetición propia de las retóricas religiosas en las prácticas, ritos y plegarias.
Si observamos con detalle en este discurso el significado principal no es que las masas sean militantes de un partido político (el partido tiene, por supuesto, su propia vida y fines), sino que formen parte de un cuerpo de la patria de la que el líder es órgano vital (“Chávez, corazón de la patria”). Y por otro lado, las promesas que se ofrecen no se expresan en el lenguaje de las políticas públicas, laicas y ciudadanas, sino como “misiones”, que es un término que engloba lo cristiano y lo militar, y que aluden metafóricamente al amor del líder por el pueblo. No se ofrece, por ejemplo, un “programa de atención médico social dirigido a las mujeres con embarazo precoz y a los adolescentes en situaciones de riesgo e incapacidad”, sino la Misión Hijos de Venezuela. O, en vez de “programas de atención integral para las personas de tercera edad de los sectores de bajos recursos” aparece la Misión en Amor Mayor. Los nombres concedidos a las misiones, sin excepción, convocan a los sentimientos, al amor, y a la protección del líder.
Como dije al principio, no hay ninguna duda de que estamos hablando de beneficios materiales concedidos por el gobierno a los sectores de pobreza, y que consiguientemente eso genera una condición de obediencia y sometimiento ante quien los concede. Pero es mucho más que eso. Es la creación de una suerte de iglesia-patria, en la que los fieles conviven unidos por los lazos que los vinculan al padre-líder, y a Cristo-Bolívar, por el amor que les dispensa a todos y a cada uno de ellos por igual (con excepción, por supuesto, de aquellos “infieles” que no forman parte de esa comunidad, y por ello son “antipatriotas”). Todos los fieles forman parte de esa gran comunidad, que es la patria, que es el cuerpo de Chávez, que es el cuerpo de Bolívar (literalmente expuesto), y  “Cristo, mi señor” es el único por encima del líder, y a su vez lo ama y cuida para que su vida alcance a cumplir la misión que le ha sido encomendada en la tierra.
Esos lazos de amor producen una fuerte identificación entre la masa y el líder, que es quien representa el conjunto de valores e ideales que dan sentido a todo. Ciertamente ese conjunto es bastante indefinido, pero por ello mismo permite que todos puedan interpretarlo y comprenderlo desde su propia subjetividad. Si se propusiera, por ejemplo, la dictadura del proletariado, elemento esencial del marxismo tradicional, o se invocara a Marx, como genio iluminador, pocos se verían reflejados; en cambio en la felicidad de la “patria nueva y bonita” cualquiera puede colocar sus propias esperanzas. Y pareciera que así ocurre.


Protestar y votar:Las comunas son parte de la estrategia para liquidar la democracia


CARLOS MACHADO ALLISON*
Las comunas son parte de la estrategia para liquidar la democracia
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Me sorprende, y me incluyo, la extraordinaria tolerancia de los venezolanos. Vivimos asilados en nuestras viviendas, tenemos miedo de hablar, protestar y hasta salir de nuestros hogares. Circulamos en rutas predeterminadas, no nos atrevemos a salir de noche y como conductores pasamos horas en las colas mirando por el retrovisor y tratando de adivinar las intenciones del próximo motorizado, de los ocupantes del vehículo que tenemos atrás o de la lujosa y negra camioneta de algún funcionario con sus escoltas. El Banco Central nos abruma con su propaganda sobre la reducción de la inflación, pero cada día aumenta la factura del mercado y disminuye la cantidad de lo adquirido.

Más de 500 mil venezolanos han abandonado el país y con ellos ha migrado el capital más importante de una nación: el talento.

Las universidades autónomas, junto a algunas privadas, las mejores del país, están económicamente acorraladas por un gobierno que no tolera la disidencia, detesta la inteligencia y odia el éxito porque ha basado su poder en el populismo más ramplón -y efectivo desde el punto de vista electoral- que hayamos visto en América Latina.

En efecto, ¿qué importa que los 25 mil profesores universitarios tengan una remuneración miserable o que la investigación científica y el desarrollo tecnológico hayan retrocedido 20 años? Tampoco parece tener mucho impacto que el Gobierno confisque fincas, estacionamientos o negocios, que se apodere de bancos, canales de televisión y que trate de controlar el cerebro de los niños mediante la imposición de programas educativos. Ahora, como si fuera poco el daño causado, tratarán de reducir la importancia de las gobernaciones y alcaldías trasladando el centro del poder a unas "comunas" que sólo serán reconocidas si sus dirigentes están alineados con el Gobierno. ¿Por qué son tan importantes las comunas para el gobierno?

La estrategia

La respuesta es simple. Son parte de la estrategia para burlar la Constitución y liquidar a la democracia. Los representantes de las comunas, a diferencia de los gobernadores y alcaldes, no serán electos en forma directa y sólo serán aceptados cuando un ministro les dé el visto bueno. ¿Qué debemos hacer? Fortalecer las instituciones existentes mediante el voto. Si a algo teme el Gobierno es perder posiciones regionales y locales de poder, porque carecen de candidatos competentes.

Los ciudadanos debemos evitar que a los terrores que nos acosan, se sume otro, vecinal, ilegal y apoyado por las armas, que decidirá cómo debemos vivir, comer, hablar o educar a nuestros hijos.

Existen compatriotas desilusionados y otros que piensan que la "oposición" -como si ellos no fueran parte de la misma- no ha sido tan eficaz como debiera. Para ellos mi invitación a votar y a protestar. Pero como respeto a las personas, no puedo, ni debo, decirles más. Que cada uno actúe de acuerdo a su conciencia, competencias y principios.

cemacallison@gmail.com
 EL UNIVERSAL
martes 20 de noviembre de 2012  

lunes, 19 de noviembre de 2012

El terremoto que desató Julio Borges

frentepatriotico.com

El pasado 13 de noviembre, el Coordinador General de Primero Justicia, diputado Julio Borges, declaró públicamente que “el proceso constituyente (anunciado por el oficialismo) surge por un problema interno que tiene el Gobierno, que es la enfermedad del Presidente. No tiene sentido que el Gobierno hable de Poder Constituyente y Poder Popular si ya todas las leyes están aprobadas. ¿Cuál es el sentido de todo eso? (…) Esa supuesta reforma a la Constitución lo que prevé no es otra cosa que el Vicepresidente, en caso de ausencia del Presidente, se mantenga en todo el período presidencial” (http://to.ly/hgYM).
Esta importantísima revelación, que extrañamente no tuvo la difusión que amerita, implica que Chávez engañó al país, lanzando su candidatura a sabiendas de que estaba gravemente enfermo, y por tanto incapacitado para terminar el período presidencial. También implica que, muy probablemente, el año que viene se producirá lo que la Constitución define como la “falta absoluta” del Presidente.
El Artículo 233 de la Carta Magna explica que “serán faltas absolutas del Presidente o Presidenta de la República: la muerte, su renuncia, la destitución decretada por sentencia del Tribunal Supremo de Justicia, la incapacidad física o mental permanente certificada por una junta médica designada por el Tribunal Supremo de Justicia y con aprobación de la Asamblea Nacional, el abandono del cargo, declarado éste por la Asamblea Nacional, así como la revocatoria popular de su mandato”.
Más abajo, el Artículo 233 señala de manera inequívoca que “cuando se produzca la falta absoluta del Presidente o Presidenta de la República durante los primeros cuatro años del período constitucional, se procederá a una nueva elección universal y directa dentro de los treinta días consecutivos siguientes. Mientras se elige y toma posesión el nuevo Presidente o Presidenta, se encargará de la Presidencia de la República el Vicepresidente Ejecutivo o Vicepresidenta Ejecutiva”.
Por tanto, de ser cierto lo que dice el Dr. Julio Borges –y no existen motivos para dudar de su palabra– en el 2013 tendremos una nueva elección presidencial; a menos que, como él mismo señala, el Gobierno pretenda modificar la Constitución, para que el Vicepresidente asuma durante el resto del período, en cuyo caso iríamos a un referéndum consultivo. ¡Vaya terremoto político lo que se desprende de las declaraciones de Borges!
Para el ciudadano de a pie, como el humilde servidor que escribe estas líneas, eso significa que pronto tendremos una nueva oportunidad para lograr un cambio de gobierno e impedir que se implante el comunismo en Venezuela. Pero también se evidencia que no podemos acudir a esas nuevas elecciones con las mismas condiciones existentes el 7-O, porque con un CNE parcializado, REP viciado, máquinas de votación electrónicas manipulables, aparatos caza huellas que revelan el secreto del voto, y el ventajismo del gobierno, es imposible que la oposición gane una consulta popular.

frentepatriotico.com

lunes, 5 de noviembre de 2012

Elogio de la cobardía…

 
Rafael Muci-Mendoza

Euristeo en su jarrón…

                                                    
Sibilinos y silenciosos han ido torciendo normas y reglamentos como si nadie les viera...
...tenemos que salir todos a votar y pedir a nuestros conductores y en mayúsculas, que exijan respeto por parte del CNE (...)

La cobardía es un vicio que lleva a toda anulación del valor. Los hombres cobardes, como aquel Euristeo rey de la Argólida, gran pusilánime la mitología hercúlea, no son merecedores del poder que ostentan, tiemblan de miedo por su imperfección física y moral y salen a esconderse en jarrones de bronce: instituciones del estado donde se creen protegidos. Como la envidia, la cobardía es hija del diablo, y en su momento tendrán que rendir esas cuentas que ciegos, no pueden rendir ante sus propias conciencias.
No hay nada que refocile más al enemigo como observar al otro cejijunto y cabizbajo con ánimo desecho, con apariencia de derrota; pero a la inversa, no hay cosa que desarme más al enemigo que la convicción del coraje del contrincante, a pesar de todas sus trapazas. ¡Caramba! Somos más de seis millones de opositores. Hablemos claro, llamemos al régimen  como lo que es, una dictadura. Proclamemos con claridad los despropósitos del CNE y su latente soledad y cobardía interiores. Sibilinos y silenciosos han ido torciendo normas y reglamentos como si nadie les viera, exijamos con toda la fuerza que nos da la ley el respeto a nuestro derecho de tener un registro depurado y limpio. No estamos derrotados, no podemos dejarnos vencer, no podemos ser cobardes y abandonar cualquier espacio que hayamos conquistado mediante votos, tenemos que salir todos a votar y pedir a nuestros conductores y en mayúsculas, que exijan respeto por parte del CNE, institución de rectores obsecuentes e injustos. Como en la fábula de Esopo, La Tortuga y la Liebre, con constancia y paciencia, aunque a veces parezcamos lentos, obtendremos siempre el éxito.
¨Los cobardes mueren muchas veces antes de su verdadera muerte; los valientes prueban la muerte sólo una vez¨. William Shakespeare.

 firmamuci2



 

jueves, 1 de noviembre de 2012

Se equivoca Ramón Guillermo Aveledo


Lamento decirlo de una persona siempre admirada, a quién conocí a finales de los setenta, no es cierto que la sociedad venezolana actuara el 7 de octubre bajo el signo del miedo, asustados por las amenazas del régimen, la prueba  fue la  afluencia de  votantes, el enorme número de personas sufragando  contra  todo lo que representa este demoníaco régimen, es una  mentira decir  que actuamos con miedo, con miedo y cobardía  actuaron nuestros dirigentes,  que una vez más  nos dieron la espalda, que no tuvieron  el coraje para entender  lo que estaba anunciado, que se hicieron sordos ciegos ante estudios como el de Eric Ekvall, que no es  ningún loco de carretera, sino por el contrario un avezado técnico  electoral, le tuvieron pavor a un cambio de paradigma, con temor actuaron los dirigentes de la MUD que se callaron  e hicieron como se dice oídos sordos ante todos los informes que le llegaban en especial del FRENTE PATRIOTICO,  sobre ese envenenado REP,  con cobardía actuaron ellos  cuando nos vendían en todo momento hasta la saciedad que era un proceso limpio, que un fraude era imposible, cuando enviaban a su vocero Enrique Márquez  en su condición de “gran técnico” a convencernos de lo que ellos  ya sabían  que era mentira, que el fraude electrónico estaba montado y la prueba evidente de todo es que  lo denunciado por el señor Ekvall se cumplió casi al detalle, por eso sostengo que se equivoca el Doctor Ramón Guillermo Aveledo, no somos un pueblo pajarero ni de cobardes, hemos luchado contra este régimen desde antes de  su instarauración, cobardes y entreguistas son nuestros dirigentes políticos que jugaron  con la dignidad de este pueblo, con nuestra credibilidad una vez más,  todo esto me lleva a intentar buscar respuestas que de antemano sé que no las darán.
La campaña electoral en sí, se montó sobre la mentira y el engaño, ¿por qué lo digo?, en todo momento quizás recogiendo lo que ya había proclamado María Corina Machado, Capriles se montó en la ola “Ni un barril de petróleo gratis para ningún país extranjero mientras existan necesidades en Venezuela”, pero mientras esto era repetido días tras día en todas las concentraciones, el Doctor Ramón Guillermo Aveledo, fue acusado públicamente y nunca desmentido  que había  viajado secretamente a Cuba a entrevistarse con Raúl Castro, posteriormente a ese viaje, salió Capriles declarando que de ganar  las elecciones se entrevistaría de inmediato  con Raúl Castro y que no había ninguna razón para una suspensión de relaciones, lo que equivale a decir, que mientras públicamente decía una cosa en relación al petróleo, otra se maneja por la puerta de atrás, ofreciéndole  seguridad  a los  gobernantes cubanos y con ello más esclavitud al sufrido pueblo de ese país. Fue el exiliado periodista  venezolano Roberto Carlo Olivares, quién desde Miami hizo primero la denuncia del mencionado viaje, a través de su  muy leído boletín semanal.
Otra denuncia que se ha hecho  públicamente y todos los involucrados callan, es sobre la  reunión que presuntamente se efectuó en  Miraflores  antes de las elecciones de noche, entre José Vicente Rangel. Armando Briquet, Julio Borges con la  sempiterna presencia de Teodoro Petkoff (recuerdan  la nombrada  reunión el día de las elecciones entre Manuel Rosales y José Vicente Rangel, en la Viñeta con asistencia de Teodoro), se repite la historia y solo cambian algunos de los actores, ¿que se manejó en esa reunión?, porque tanto secretismo, nos han tratado como que fuéramos  ignorantes, se les olvido que hay personas interesadas en todos los niveles  y que  a la hora de la verdad se la saben jugar y que a pesar de todo lo que trataron de ocultar, la luz siempre alumbra.
Esto nos lleva  a las elecciones donde Manuel Rosales fue el candidato, recuerdan que junto con Rosales  salieron candidatos Julio Borges y Teodoro Petkoff y tras unas pequeñas escaramuzas de repente estos renunciaron a sus candidaturas sumándose a la Rosales, bastante se comentó entonces  sobre una maniobra del chavismo en todo esto, los resultados todos los conocemos.
Porque no han desmentido a María Corina Machado, cuando en un   muy escuchado programa de radio, denunció que estaban desaparecidas 3.900 actas electorales y que la MUD se callaba  ante esta insólito situación, que eso era una burla a los electores y era obligación de la MUD denunciar el hecho, pero de eso tampoco nada han dicho, han pretendido tratar de embaucarnos  con la presentación de unas actas de escrutinios, pero nada  dicen  cuando se les reclama  por la presentación de las “CONSTANCIAS DE VERIFICACION CIUDADANA”,  donde están, por que no las presentaron, ¿Porque Capriles  se precipitó  tan insensatamente a reconocer el triunfo y a felicitar a Chávez, sin tener en la mano estas Constancias, demasiada premura, por todo esto y mucho más  de ser posible es que le digo Doctor Aveledo, con todo mi respeto, “usted se equivoca”, nosotros el pueblo, si cumplió, si tuvo  gallardía, voluntad y valor, los que no cumplieron  fueron ustedes, pretenden decirnos  con tanto descaro,  que reconocieron  el triunfo fraudulento de Hugo Chávez, para evitar males mayores, para evitar un posible derramamiento de sangre, que falacia, señores les parece poco el constante derramamiento de sangre a manos del hampa en el país. Cuando fuimos a las elecciones sabíamos lo que nos jugábamos, por eso repetíamos  constantemente  “vota y defiende tu voto.”, yo personalmente  se de muchachos y muchachas de VOTO JOVEN, que esa  tarde y en la noche, lloraban de impotencia porque nadie en la MUD hacía caso  de las miles de denuncias que tenían sobre el fraude.
Todo apunta y allí están todas las pruebas que se han presentado por tantas personas, “que si hubo un gran fraude electrónico” manejado por hackers Chinos y Rusos, como es lógico con la total  complacencia de esa inmundicia que se llama CNE y sus rectores todos manejados  a simple vista por  el jefe de este nefasto régimen.
MIGRACIONES
Bastante ya se ha hablado sobre este nuevo delito electoral que  han cometido los cinco llamados rectores de eso que llaman oficina electoral de Miraflores, pero ojo, esto  es nada  con lo que se avecina y que se está  ya denunciando, serán miles  las migraciones silenciosas que se van hacer desde Caracas para diferentes estados y la razón  de hacerlo desde Caracas  es que  aquí no  hay elecciones el 16 de diciembre  y necesitan reforzar a algunos  candidatos oficialista, los técnicos electorales de la MUD están suficientemente  advertidos sobre esto, hablo de los cinco rectores  por que el señor Díaz  ya se quitó la careta públicamente, cuando salió a felicitar a Chávez y a decir  que  lo admiraba y lo llenó de elogios sin comparación, ahora nos  enteramos que este señor  fue llevado a ese cargo por el funesto grupo que llaman  “La Colina”,  jefaturado por el inefable Teodoro Petkoff y que el señor Díaz es una ficha muy valiosa dentro del CNE de la empresa Smarmatic, ¿la recuerdan?, Es que definitivamente no teníamos una para ganar. Nos preguntamos, ¿hasta cuándo tendremos  a personas  como Petkoff jugando con la dignidad y la credibilidad de este pueblo?, se  cansa uno verdad.

FRENTE PATRIÓTICO

Hjmrodriguez@gmail.com.   Twitter: @Hmarcano R.

jueves, 18 de octubre de 2012

La gran resaca

Pasados diez días de las elecciones presidenciales, millones de personas que votamos por la candidatura que representaba la opción democrática nos encontramos con los ojos claros y sin vista, sin derecho a pataleo, sin posibilidad de exigir una auditoría y aceptar los hechos cumplidos, avalados antes, durante y después del acto electoral por la Mesa de la Unidad Democrática.
La MUD no hizo otra cosa que legitimar al CNE, nos explicaron de todas las formas que el fraude electrónico era imposible, que las captahuellas eran máquinas inofensivas, inútiles, que sólo eran disuasivas para efecto de los empleados públicos. Pero al parecer, esos funcionarios se traicionaron a sí mismos votando por lo que más temían o por lo que les inspiraba repugnancia, y en su laberinto interior eligieron sin respeto elemental a las reglas de la lógica.
La MUD nos garantizó la idoneidad, transparencia, efectividad del sistema automatizado, a pesar de que generaba tanta desconfianza en gran cantidad de electores. La MUD cumplió la tarea de hacernos creer ciegamente en todas las explicaciones que hacían quedar al ente comicial como impoluto.
La MUD repitió el mismo discurso oficial y nos presentó “el mejor sistema del mundo”, a pesar de que en países desarrollados recurren a un sistema manual, y cuando hay trampa fácilmente se descubre con un simple reconteo de votos.
La MUD se mostró confiada en esas niñas de pecho de Tibisay Lucena, Sandra Oblitas, Tania D’Amelio y Socorro Hernández, vinculadas con el PSUV y fervientes seguidoras del comandante presidente.
Sin embargo, fuimos a votar, alegres y entusiastas, ignorando que íbamos al matadero.
Algo que se podía prever, ni siquiera era difícil.
Los voceros de la MUD afirmaban que el sistema electoral estaba blindado, que no había posibilidad de fraude ni de resultados abultados en la sala de totalizaciones, que es la verdadera caja negra del organismo electoral. Creímos en los argumentos de nuestra dirigencia, a pesar de que el CNE está en manos de unas talibanas que sólo responden a los dictados de Miraflores. Pero fue tanta y tan seguida la firmeza demostrada por la MUD para obtener nuestra confianza en el proceso, que me pregunto si ese mismo empeño lo hubieran puesto para exigirla limpieza del registro electoral, el fin de las migraciones silenciosas con las cuales privaron a muchos electores de su derecho al voto, el que no se conculcaran derechos constitucionales de los venezolanos en el exterior, que se vieron imposibilitados de votar; en fin, si hubiéramos exigido mejores condiciones, a lo mejor no estuviéramos en esta esquina lamentándonos y en este estado de desolación, desconcierto, incredulidad.
Las explicaciones sobre lo que pasó suenan como palmaditas de consuelo en la espalda, mucho menos convencen esos argumentos pueriles de que no hay derrotados, que ganó Venezuela y otros lugares comunes e infelices, como si estuviéramos en una democracia real.
Con un CNE parcializado, que permite el ventajismo y las marramucias del régimen, la oposición continuará en la acera de enfrente, a no ser que nos dispongamos a ejercer mayor control electoral. La dirigencia tiene que hablar claro antes de cada acto electoral, tenemos el derecho de saber a qué atenernos en venideras elecciones, empezando por las regionales del 16 de diciembre, para que no vengan con esos eufemismos de que las elecciones fueron sucias pero que no hubo trampa. Dejen de ser condescendientes con los delincuentes electorales y llamen las cosas por su nombre: fraude, ventajismo, manipulaciones, que siempre terminamos perdonando y aceptando de forma inexplicable.

domingo, 14 de octubre de 2012

Romero: “Derrota es derrota y la del 7 de octubre fue contundente"

Aníbal Romero

LA NADA
Por: Aníbal Romero
Este artículo fue publicado en el diario "El Nacional" de Caracas el 10OCT12.
No me sumaré al coro de felicitaciones por los reales o presuntos logros de la oposición el pasado domingo. Hubo un avance en número de votos y reconozco el esfuerzo realizado por el candidato unitario, su equipo, y los millones de venezolanos que aportaron sus empeños a la causa democrática. Pero derrota es derrota y la del 7 de octubre fue contundente. Varias encuestas lo pronosticaban pero preferimos creer las que generaban buenas noticias, con débil fundamento.
Me parecen excesivos los halagos y alabanzas con relación a lo ocurrido. Como sabemos, las expresiones de civilidad y respeto del Presidente no durarán mucho y no debería sorprendernos una nueva ofensiva, destinada a radicalizar el proceso y cumplir lo prometido: hacerlo irreversible.
Me preocuparon el tono y ausencia de contenidos en las manifestaciones de varios líderes opositores el pasado domingo, cuando aparecieron por televisión en medio de la incertidumbre entonces imperante. Cebe preguntarles si creen que están en Suiza o Dinamarca, en el marco de una democracia normal y mecanismos electorales creíbles. Todos sabemos que no es así y sin embargo las presentaciones de estos dirigentes transmitían un airecillo presuntuoso y enrarecido, así como palpable autocomplacencia.
¿Soy acaso el único en notar que la dirigencia opositora comienza a creer que lo está haciendo de maravilla y a adoptar un tono irritantemente pomposo y petulante? Sonrisas y deleite con el propio discurso se combinan con el más craso populismo en las alocuciones de algunos de ellos.
Es cierto, hubo un avance, pero por ello se ha pagado un costo. Me refiero a la continua claudicación ideológica de la oposición, que ha adoptado con bombos y platillos la agenda de Chávez. No dudo que el candidato de la unidad tenía que asumir el tema social si deseaba comunicarse con las mayorías, pero no creo que debió hacerlo pagando el precio de dejar por completo de lado el carácter trágico que tiene lo vivido por Venezuela estos pasados años, presentándose como el leal competidor en un torneo equilibrado y justo.
Venezuela se ha convertido, entre otras cosas, en el principal soporte de la perdurabilidad del despotismo castrista, pero de ello ni una sola palabra por parte del candidato unitario. No solamente asumió las dádivas y subsidios como un programa permanente sino que prometió multiplicarlos y darles carácter legal, reforzando el camino de dependencia y sumisión abierto por Chávez a un pueblo cada día más atado al Estado paternalista y depredador. El miedo a la abstención les llevó también a callar ante los evidentes abusos, mentiras, desmanes y desequilibrios de un árbitro y un sistema electoral sencillamente deleznables, que hacen prácticamente imposible una competencia legítima y balanceada.
Me he enfrentado a Hugo Chávez y su rumbo destructivo desde el 4 de febrero de 1992 hasta el presente. Pero siempre le he reconocido al caudillo "bolivariano" que tiene convicciones firmes, que no anda con rodeos ni medias tintas, y que en su alma no hay un vacío sino una mezcla de resentimientos y disparates ideológicos que al final se vuelven creencias, por negativas que sean. No percibo lo mismo en la oposición. Allí siento un vacío espiritual, un ánimo de arreglo y contemporización a toda costa, una renuencia a llamar al pan, pan, y al vino, vino. Además, la negación del pasado en general, y de lo positivo de la República Civil en particular, es cuestionable. Negar el pasado es desnudar el futuro. Son actitudes que debilitan; actitudes repudiables que revelan carencias esenciales.


 Este artículo fue publicado en el diario "El Nacional" de Caracas el 10OCT12.




Estamos a tiempo para exigir un sistema electoral transparente.

Alejandro Pietri C.
La situación de la oposición se presenta conflictiva después del 7 de octubre. Las esperanzas de millones de venezolanos se fueron al suelo después de meses de una campaña electoral intensa por parte de Capriles. Las grandes movilizaciones que su presencia concitaba a lo largo de su recorrido por centenares de pueblos, sin coacciones, sin franelas, sin autobuses, y el ambiente de victoria sentido en las calles, las oficinas, los lugares públicos, se deshizo instantáneamente, como cuando el Revocatorio, en millones de fragmentos, como si hubiera explotado un bombillo cósmico, inesperadamente, sorpresivamente, trágicamente.

El reconocimiento inmediato y la declaración de ausencia de fraude, impresionó a muchos de sus electores. Esperaban al menos una reacción de algún tipo, un pequeño gesto de inconformidad al menos, algo paralelo a la decepción y a la sorpresa que invadió a gran parte de la ciudadanía. Pero fue todo lo contrario, no sufrimos una derrota sino que ahora somos el 46% de la población – o del electorado, más bien-, lo cual nos identifica como una gran fuerza política, hecho este de gran importancia para un líder que ahora es cuando tiene sólo cuarenta años de edad y le sobra tiempo para muchas más elecciones. Bendito él entre ese gran electorado de la tercera edad, al que sólo le quedará resignarse a vivir su poca vida restante bajo la égida de una dictadura comunista, genocida y empobrecedora como la que impone a paso de bolserías opositoras el comediante presidente.

Los defensores de la virginidad del CNE han tomado en cambote los medios para pontificar en contra de los que aludimos el fraude como causa de la derrota. Tan insultantes como el capataz al que dicen combatir, desechan argumentos y se montan en consignas sin aportar soluciones a esta situación tan peligrosa para el país de cara a las próximas elecciones. De hecho sólo insisten en que hay que ir a votar masivamente y listo.

Se repite la misma actitud que generó toda la suspicacia respecto al CNE y al sistema electoral, a partir del fraude del Revocatorio  –“que tampoco existió”- y la gran abstención en los comicios para la AN consecuente, de más de un 80% por parte de una ciudadanía opositora ofendida por el fraude, y que demostró su real y definitiva mayoría al dejar vacíos los centros electorales. Este grito, este contundente mensaje ciudadano, no fue oído por la dirigencia opositora, la cual debió haber tomado entonces la bandera de “elecciones libres y transparentes”, sino que al contrario, incomprensiblemente –por decir lo menos-, culpó a los ciudadanos de una conducta errónea que resultó en una Asamblea chavista.

Se olvidaron entonces, como se olvidan ahora, que la misión del político es oír los mensajes de la ciudadanía, analizarlos y establecer líneas de procedimiento, estrategias o conductas acordes con las necesidades o exigencias ciudadanas, por que para eso están. No para disfrazar la verdad o esconder la realidad, como lo hace el capataz, por que eso sólo sugiere un pobre concepto de la sociedad a la cual pretenden por los momentos defender y, luego, gobernar.

Habría sido racional durante estos ocho años desde el Revocatorio, demandar firmemente leyes y reglas electorales claras, que garantizacen la seguridad y transparencia de todo el proceso electoral, de manera que los ciudadanos tuviésemos la certeza de que el votante no puede ser objeto  de coacciones o amenazas de ninguna especie, y de que el voto sea absolutamente secreto y transparentemente escrutado por la sociedad y no por el régimen, como se hace a través de un sistema digital de cuyos intríngulis técnicos no tenemos ningún conocimiento los votantes.

Estos señores tan sabios pero tan insultantes, defensores de un sistema electoral del cual desconfía la mayoría, podrían acabar con esta situación tan peligrosa con las siguientes medidas:

  • Manifestando públicamente la necesidad de un sistema electoral de absoluta confiabilidad, por que la democracia necesita eso: confiabilidad, transparencia, no máquinas ni tecnología.
  • Publicación del Registro Electoral completo, por que el hecho de que haya sido presentado o mostrado a la MUD no excluye el deber del gobierno de presentarlo a la ciudadanía, la cual está en todo su derecho de exigirlo.
  • El escrutinio de todas las cajas de votación y su conteo obligadamente público en presencia de medios públicos y privados.
  • Presencia de observadores nacionales e internacionales por iniciativa gubernamental y de los partidos políticos.
  • Ejecución de exit polls.
  • Eliminación de las máquinas captahuellas.

Ninguna de estas medidas contraviene las leyes ni altera la infraestructura electoral. El sistema de trasmisión y totalización de datos no sufrirá ninguna alteración. Al contrario podrá servir para comprobar o demostrar la exactitud de sus números.

Si el régimen no acepta estas exigencias, estará demostrando que siempre ha hecho fraude y que se dispone a continuarlo.

¡Estamos a tiempo!


jueves, 11 de octubre de 2012

Los 3 errores

ANGEL OROPEZA
  "En política todas las victorias son efímeras, y todas las derrotas son provisionales". (M. Fraga I.)"
  " La tesis del fraude (sospechosamente propagada por los laboratorios mediáticos del gobierno) lo que busca es la desmovilización del pueblo del progreso, ya que si hubo fraude, y la oposición lo sabe y lo permitió, no puedes votar por ella en diciembre, donde nos jugamos no sólo la presidencia de la República, sino toda la geografía del país"
 
El domingo fue de celebración para una mitad del país, y de tristeza para la otra mitad. Lo último es natural, dado que no se alcanzó el objetivo propuesto. Nos faltó tiempo. Hay que darse permiso para ese sentimiento. Pero luego de expresar nuestra tristeza, lo inteligente es levantarse, y estar preparados para los acontecimientos por venir.
 
Es prioritario analizar lo ocurrido, porque la conducta futura del país va a depender de su interpretación de lo que pasó. La votación de Chávez es cualquier cosa menos homogénea. Allí coinciden aquellos movidos por su simpatía hacia el actual presidente y los satisfechos con el rumbo del país, con los amenazados con perder su trabajo, las víctimas del miedo (a perder beneficios reales o prometidos), los todavía creyentes de que el voto no es secreto (y por tanto, no era conveniente arriesgarse), hasta los beneficiarios de los más de 200 mil millones de dólares de los que ha dispuesto el actual presidente en los últimos 6 años para gastar a discreción. Y a pesar de eso, el crecimiento de la votación oficialista con respecto al 2006 es mínimo, sobre todo comparado con el aumento de más de 43% de la votación opositora. Definitivamente, nos faltó tiempo. Si la elección hubiese sido en diciembre, como era la tradición en Venezuela, el resultado habría sido muy diferente.
 
Para el país del progreso, esta fue una gran victoria política, que no llegó a traducirse en una victoria electoral. Se conformó una plataforma unitaria sólida, se llevó un mensaje a todos los rincones del país, se edificó una propuesta política fresca, atractiva, de fuerte inspiración popular, que va a servir de alimento a las luchas que vienen. Y además, el país cuenta con un nuevo y legitimado líder, con la capacidad intelectual, física, y la claridad política para capitanear el equipo de la nueva Venezuela. Hay un camino, hay un equipo, y hay un líder.
 
Por eso es tan importante evitar 3 errores que pueden acecharnos en estos primeros días:
 
1. Creer que Chávez ganó por fraude. Si bien la campaña fue muy desbalanceada y corrupta por parte del bando oficial, Chávez ganó porque sacó más votos. La tesis del fraude (sospechosamente propagada por los laboratorios mediáticos del gobierno) lo que busca es la desmovilización del pueblo del progreso, ya que si hubo fraude, y la oposición lo sabe y lo permitió, no puedes votar por ella en diciembre, donde nos jugamos no sólo la presidencia de la República, sino toda la geografía del país. Si la tesis del fraude se impone, los poderosos harán fiesta, porque lograrían evitar lo que hoy es una amenaza para ellos: que la mitad del país que se expresó el domingo, lo vuelva a hacer en diciembre e impida que nuestra patria se tiña de un solo color. Los asesores del oficialismo van a jugar psicológicamente en estas semanas con la frustración opositora, y a alimentarla hasta que se convierta en desesperanza, y luego en inacción y abandono.
 
2. Creer en las derrotas definitivas. Hay que evitar esta visión lineal, determinista de la vida, según la cual es posible predecir los acontecimientos futuros a partir de los presentes. Esto está muy lejos de ser el fin de la historia. La política, al igual que la vida, no es lineal sino sistémica, y frente a ella lo que hay que hacer es ir continuamente agregando elementos a ese sistema para que pasen cosas. Nadie sabe lo que nos espera ni lo que va a pasar en Venezuela. El futuro es altamente incierto e impredecible. Y de cara a esa incertidumbre, lo único seguro es la organización y el espíritu de lucha que tenga adentro cada uno de nosotros.
 
3. Ahora, a esperar 6 años. ¡Falso! No solamente por lo que acabamos de decir sobre la incertidumbre de los acontecimientos por venir, sino porque es un error existencial y político fijarse metas tan lejanas y tardías. La próxima meta es apenas dentro de 2 meses. Y si no afrontamos bien esos retos, la amenaza que sentimos sobre el país, la vamos a sentir mucho más cerca de las puertas de nuestras casas. No es lo mismo tener de presidente al actual, pero tener de gobernador a Henrique Capriles o Adriana D Elia, para quienes vivimos en Miranda, que a alguien como Jaua o Jorge Rodríguez. No es lo mismo Pablo Pérez que Arias, ni mucho menos Henri Falcón que Reyes. Estamos hablando de 2 países radicalmente diferentes, y eso se decide en diciembre, no el pasado domingo. Salvo, por supuesto, que permitamos que eso pase porque estemos tristes. Y no es solamente levantar un muro de contención regional, estadal y municipal contra estas amenazas, sino que no es lo mismo seguir construyendo un camino desde la inmensa altura que hemos alcanzado, que volver a comenzar desde cero.
 
El pueblo del progreso es un pueblo guerrero, y los guerreros no saben sino pelear. El camino que nos queda es pedregoso y duro, pero -según el Evangelio- es el camino difícil el único que conduce a la tierra prometida.
| EL UNIVERSAL

miércoles, 10 de octubre de 2012

Bajo la falsa égida de El Libertador, perdemos, paradójica. pero lenta y sistemáticamente, la libertad

Alejandro Pietri C.
Estoy despertando del duelo que aflige a la mayoría democrática de este país. La tristeza y el desencanto dan lugar a la indignación y a la perplejidad. Realmente creí estar preparado para afrontar filosóficamente la situación. No fue posible. Tiene que haber habido una esperanza muy profunda, una ciega e inconsciente convicción de que nunca podría pasar lo que pasó; de que nunca quedaríamos a merced de un régimen patán, corrupto y destructivo que pudiese autocomplacerse en el aplastamiento y la eliminación de todas las normas, tradiciones y valores que estructuran los sistemas y esquemas jurídicos, éticos, morales y culturales que dan vida a los pueblos libres.
Tristemente, bajo la falsa égida de El Libertador, perdemos, paradójica. pero lenta y sistemáticamente, la libertad

Hemos asistido a un proceso comicial pleno de vicios, violaciones, ventajismo, amenazas, coacciones, abusos y corrupción, bajo la mirada indiferente y cómplice de una directiva burocrática escénicamente electoral, de proyectadas y ejecutadas metas autoritarias en el pasado que, como era de suponer, fueron impuestas  de nuevo a favor de quienes la crearon y mantienen en vigencia.

En oportunidades anteriores he manifestado mi desacuerdo con los actos de supuesta intención electoral que pudiesen liberarnos de la tiranía por el hecho concreto de que el árbitro, así llamado eufemística y oficialmente, es posesión absoluta del contrincante electoral, el régimen, y que por lo tanto mal podríamos esperar de él la más insignificante neutralidad. Sólo una gran ingenuidad, limítrofe con lo irracional, podría avalar, en este caso, la esperanza de un mínimo de respeto democrático por la voluntad ciudadana.

No merecemos esto, aunque hayamos cumplido ya ocho años del Revocatorio fraudulento del 2004 llevados por un discurso absurdo de olvidar el fraude, de pasar la página como si nunca existió, de guardar silencio por un absurdo temor de propiciar la abstención y no poder ocupar los espacios de poder en el camino de la reconquista de la democracia. No lo merecemos por que aún con las dudas, con la desconfianza arraigada en nuestros corazones, hicimos tripas de ellos y como demócratas, o como ingenuos, o como ciegos, o como absurdamente esperanzados, acudimos una y otra vez a unos comicios que sabíamos, en nuestro interior, estaban arreglados. Arreglados al ganar o al perder y siempre con diferencias útiles al poder de acuerdo al estado de las cosas o de lo que dictara la prudencia de la tiranía, que se toma su tiempo mientras hunde lentamente sus garras dentro de la población que manipula, explota y empobrece.

Se me hace imposible tomar posiciones entre los razonamientos de quienes aconsejan seguir en la misma forma, creciendo, ocupando los espacios que, pienso, nos dejan, o de  quienes consideran que el camino electoral está cerrado desde hace años y que hay que tomar otros derroteros políticos más razonables, pero siempre excluyentes del golpe o la violencia, o de otros, desesperados, que se aferran a estos últimos.
Esperar nuevas y repetidas elecciones mientras se acaba con los últimos vestigios de libertad, se arrasa con los derechos humanos, se despoja a los ciudadanos de sus propiedades, de sus proyectos, de sus sueños, mientras el miedo nos acalla, nos ciega o nos paraliza no es opción, como tampoco lo son la violencia o el golpe con sus estelas de muerte y sufrimiento.

Los venezolanos debemos recuperar la confianza en nuestros líderes y ellos, incentivarla. Esto solamente es posible sincerando las situaciones, hablando con claridad y concreción, por que la democracia sin ello no existe.
Es necesario vincular la posición de la dirigencia opositora con los planteamientos y sentimientos de la ciudadanía democrática.

Las elecciones próximas de gobernadores exigen de una amplia participación que peligra por la desconfianza. Es necesario exigir con dureza, con fuerza,

  • la revisión pública y publicación del Registro electoral de forma convincente,
  • el conteo público inmediato al cierre de las votaciones, de todas las cajas de votación, paralelamente con el funcionamiento del sistema digital de votación legalmente establecido,
  • la presencia de los medios de comunicación,
  • la asistencia de verdaderos observadores electorales nacionales e internacionales,
  • la ejecución, como en toda democracia respetable, de encuestas a boca de urna,
  • la limitación del Plan República a acciones de vigilancia en las afueras de los centros y
  • la garantía tangible y pública de los testigos de la alternativa democrática en todos los centros de votación del país.

Estas deben ser conditio sine qua non para el reconocimiento de la legitimidad del acto electoral y, por tanto, para la  participación ciudadana en él.

Capriles, el esforzado candidato, con todo el apoyo de mucho más de ocho millones de votantes, debería convertirse en el abanderado de estas reivindicaciones ciudadanas desde estos precisos momentos. Para luego es tarde.


domingo, 7 de octubre de 2012

Llegó el día

Henrique Capriles Radonski
Llegó el día



Hoy es un día histórico para todos los venezolanos. Hoy todos vamos a decidir quién será el próximo Presidente de la República. Hoy todos debemos acudir a los centros de votación a ejercer nuestro derecho a elegir. ¡Hoy, todos a votar!
Lo que nos convoca es el poder del pueblo. El pueblo venezolano va a tomar una decisión de suma importancia. Hoy será un día de paz y de tranquilidad porque es así, en paz y tranquilidad, que vamos a llevar a cabo este ejercicio democrático. Hoy no habrá pueblo derrotado.

El voto es un derecho, una herramienta, una manera de que nuestra huella se transforme en el poder de cambiar las cosas. El sufragio es la herramienta directa de la democracia y la participación en la vida del país. Gracias al voto podemos participar en la construcción del país que queremos, independientemente de la decisión que vayamos a tomar. ¡El voto es tu voz y con tu voz te expresas!
Sin importar tu tendencia política, sin importar por quién hayas decidido tu opinión, sin importar cuáles son tus razones, te invito a votar y a convertir el día de hoy en un domingo memorable por el civismo con el cual todos acudimos a expresarnos, respetando al otro y compartiendo un derecho y un deber común.

Por eso, debemos participar, debemos expresarnos, debemos hacer uso de las herramientas de la democracia. Así, cuando ocurran las cosas grandes e importantes que deben acontecer en esta etapa de la historia venezolana, podremos decir: “Yo soy parte de esto, porque yo hice mi parte, porque yo quise participar en mi futuro”.

El compromiso con la democracia

Ya terminaron las campañas y los candidatos mostramos nuestras propuestas a los venezolanos. Ya los candidatos hablamos a toda Venezuela y dimos la visión de cómo es el país que cada uno plantea. Ahora, que cada uno de ustedes haga su balance. Que cada uno de ustedes haga su cuenta. Porque ahora les toca a cada uno de ustedes reflexionar sobre esas propuestas y elegir.
Hoy, 7 de octubre, tenemos un compromiso con la democracia de nuestra Venezuela. En esta elección se trata de escoger entre las propuestas de todos los candidatos que nos hemos postulado en esta contienda.
Ahora le toca el turno a cada uno de ustedes de tomar la decisión. Hoy vamos a decidir quién será la persona que guiará el rumbo de nuestro país durante los próximos seis años.
Hoy nos toca decidir el futuro de nuestra Venezuela.
Cada uno de nosotros se convierte en protagonista y garante de este proceso. Mientras más informado estés, más podrás hacer para llevar a cabo esta fiesta democrática. Mientras más informado estés, más podrás ayudar a quienes no lo estén. Mientras más informado estés, más podrás colaborar con el cuidado de que este proceso se lleve a cabo sin irregularidades.

Hoy todos los excesos están de más. Somos muchos más quienes queremos que la paz reine en un domingo que compartiremos con nuestros vecinos, amigos y familiares. Es el momento en que cada quien haga lo que le corresponde de la mejor manera: tú como elector, los miembros de mesa como facilitadores del proceso, nuestros hermanos del Plan República como garantes de la seguridad, los líderes políticos como canalizadores de todas las energías que hoy estarán puestas en la calle, las autoridades del CNE como entes responsables e imparciales y los medios de comunicación como prestadores de un importante servicio en fechas como ésta: la información.
En estos tiempos que corren, donde las tecnologías de la comunicación han crecido y se han puesto a la mano de muchos venezolanos, es importante no hacerse parte de la difusión de rumores, mensajes malintencionados ni informaciones sin confirmar. Parte del respeto a la opinión del otro, a la visión de país que tienen quienes no comparten la misma que nosotros, está en evitar juntos este tipo de distracciones que desvían la atención de lo importante: un evento capaz de convocarnos a todos con la mirada puesta en el futuro.

¡Vayamos a votar! Yo los invito a acudir hoy a sus centros electorales y usar esa llave que tiene cada uno de ustedes. Los invito a votar por la opción de su preferencia y a que este día sea de fiesta democrática.
Hoy va a ser un día alegre, va a ser un día hermoso, ¡Hoy va a ser el día de Venezuela!¡Que Dios bendiga a Venezuela¡ ¡Amén!


viernes, 5 de octubre de 2012

Rangel Silva y la gota de agua

Por Joaquín Chaffardet*

El ministro de la Defensa, Henry Rangel Silva, se refirió al anuncio que hizo Henrique Capriles en el sentido de que ya tiene escogido a un general activo quien sería su ministro de Defensa y opinó que es una declaración que "nunca debió haber sacado", dijo: "…no creo que haya General activo, que se preste -en el supuesto negado, por supuesto- a desarticular la Fuerzas Armadas Bolivarianas…¿cómo va a decir que va a nombrar un general activo cuando en su plan de gobierno está desarticulando a las Fuerzas Armadas?". Lo que es un a clara intervención en la campaña electoral de quien tiene a su cargo nada  más y nada menos que el Plan República. ¿Será esta la actitud de los militares el día de las elecciones, favorecer al Comediante-Presidente? ¿Actuar como activistas del régimen? Pero más grave aun, nos está diciendo que Capriles planea “desarticular” la fuerza armada y que por ello ningún oficial activo se prestará a servir con Capriles. Una amenaza de golpe de Estado abierta.

Capriles va a ganar las elecciones, no solamente lo pronostican las encuestas más serias, sino que la calle es la mejor evidencia. Y me pregunto ¿qué hará este atorrante ante la victoria de Capriles? ¿Encabezará un golpe de Estado con el Comediante-Presidente? ¿Permitirá la oficialidad semejante barbaridad? ¿Se harán cómplices de la banda de delincuentes que encabeza Rangel Silva? 

También se refirió directamente a lo que según él, es el plan de gobierno del abanderado de la oposición en materia militar, estableciendo que "ofende" a los miembros de la institución castrense. En ese sentido, concluyó lo siguiente: "Lo que demuestran con esto (supuesto plan de gobierno de Capriles) es el perfecto desprecio hacia la institución militar". En lo personal, al igual que la mayoría de los venezolanos, desprecio a todos los militares y civiles que reptan ante la presencia del sátrapa, desprecio profundamente a los militares cómplices del narcotráfico como el mismo Rangel Silva, desprecio a los militares que hicieron arrodillar a unos cadetes ante el sátrapa, desprecio a los militares jalabolas y sinvergüenzas que le adulan y le rinden culto al cobarde de Sabaneta. Y Rangel Silva es uno de los más destacado jalabolas, no rodilla en tierra sino arrastrado en tierra, ergo lo desprecio profundamente.

Y continuó balbuceando, "Entonces esos son elementos que yo, por supuesto, como ministro de la Defensa, como vocero político del gobierno revolucionario, tengo que expresar, porque han sido la gota, la gota, la gota en el vaso…", continuó Rangel Silva después de exponer que la oferta opositora leída por él, entre otras cosas, “…busca restablecer la vigencia del artículo 328 de la Constitución y eliminar a la Milicia bolivariana". Por supuesto tanto a Rangel Silva como a su amo, les molesta la Constitución y por eso la patean cada día. Restablecer la vigencia efectiva del artículo 328 es reinsertar a las fuerzas armada en la institucionalidad de la Nación, es rescatarlas del triste papel de brazo armado del PSUV como pretenden mantenerlas el Comediante-Presidente y los Rangel Silva, los Alcalá Condones y otros chupamedias disfrazados de militares. Y por supuesto Rangel Silva, a las milicias hay que ELIMINARLAS. ERRADICARLAS, porque no son otra cosa que militantes armados del PSUV, son una organización paramilitar con armas de la República para atemorizar y atropellar a los venezolanos y con el objetivo final de ACABAR CON LAS FUERZAS ARMADAS. Son los integrantes de las fuerzas armadas los más interesados en la extirpación de las milicias. Y una pregunta ¿Desde cuándo el ministro de la defensa es el "vocero político" del gobierno? o es que los militares chavistas tomaron ya el poder y no lo sabemos.

Por otra parte, Henry Rangel Silva manifestó que "…el pueblo mismo; los mismos electores y electoras, están llamados a participar a que estas actitudes que buscan encender esas chispas de la violencia (...) no sean posible…", aseguró que informes de “inteligencia” señalan que "…algunos grupos muy minúsculos (...) andan planificando unas acciones que no están en el marco de la legalidad constitucional…". Hizo un llamado a tales "grupos" a desistir de las supuestas intenciones violentas, recordándoles que han identificado "a algunas personas". Como todos los voceros del régimen anuncia que han identificado a “algunas personas” pero no dicen quienes son ni toman medidas contra ellas como promotoras de actos de violencia. Y la razones son muy simples: El principal promotor de la violencia es el Comediante-Presidente con su eterno y ladilloso discurso de violencia. Los grupos violentos son todos del PSUV , como los que le acaban de dar muerte, a plena luz del día, a tres jóvenes opositores en Barinitas y por supuesto Rangel no los va a identificar. Ni se refirió a ese grupo de delincuentes ni a esos hechos violencia. Los otros grupos son las organizaciones paramilitares del régimen: La Piedrita, los Tupamaros, los Carapaicas, los Guerreros de La Vega, etc. Esos son los violentos armados, organizados y sostenidos por el régimen, incluida la rosca de militares jalabolas feligreses de la iglesia de la corrupción chavista encabezada por el mismo Rangel Silva. 

Esta es una campanada que presagia tempestades. El jefe del Plan República en plan de campaña electoral del saliente!!!!, amenazando abiertamente al futuro Presidente con desobediencia militar!!!!. Estas declaraciones del tarugo Rangel Silva, vocero del ala golpista de la fuerza armada, obliga a Capriles como líder indiscutible de los sectores democráticos así como a todas las organizaciones democráticas, a estar preparados y pendientes para frustrar las maniobras golpistas de los desesperados ante la segura derrota del Comediante-Presidente. 

Finalmente dijo que las Fuerzas Armadas "…están capacitadas y adiestradas para actuar de manera de como manda la norma: con el uso progresivo de la fuerza…". ¿Contra quién? ¿Contra los grupos armados y violentos del régimen? Ni soñarlo, a esos los apoya Rangel y su corte de delincuentes. Las fuerzas democráticas no tenemos grupos armados. Pero tampoco nos quedaremos de brazos cruzados ante un intento de golpe de los gorilas del Siglo XXI.

El anuncio de Capriles en relación a un general activo como ministro de la defensa, ha puesto de cabeza al Comediante-Presidente y a su corte de jalabolas. ¿Quién será el Judas que ha aceptado ser el próximo ministro de la defensa? Esa es la gota que hacía falta, esa es la gota que indica que los golpistas del régimen no podrán impedir el triunfo de Capriles. Aparentemente, hay un fuerte movimiento en las fuerzas armadas decidido a impedir un golpe de mano contra Capriles y los electores.

Hay que decirle a Rangel Silva, es decir a Chávez, que no se trata de un vaso que se derramará con una gota de agua. Se trata de un aguacero de votos que inundará la Nación. Y los damnificados seguramente buscaran refugio en La Habana.

Joaquín F. Chaffardet R.
C.I. V-2.115.887
jchaffardet@gmail.com
Twitter @jchaffardet

* Tomado de:

TwitLonger

Joaquin Chaffardet (@)

Posted Tuesday 2nd October 2012 from Twitlonger