2009: AÑO DIFÍCIL E INCIERTO

 

Amanece el 2009 turbulento y lleno de expectativas diversas e inquietantes. Aunque no renunciamos del todo a los buenos deseos que estas fechas tradicionalmente propician, en el horizonte cercano avistamos nubarrones tanto en lo interno como en lo internacional.

    ¿Qué tenemos enfrente?

    

            NUEVO GOBIERNO EN LA POTENCIA MAYOR DEL PLANETA

 

1. En el marco de una crisis financiera global cuyas secuelas están por verse, un gobierno norteamericano se estrena. EEUU sigue siendo la primera potencia del planeta y su actuación, para bien o para mal, nos tocará directa o indirectamente.

    EEUU está disminuido en poder real, imagen y credibilidad, pero seguirá siendo determinante en asuntos cruciales que nos conciernen a todos por muchas décadas más, si es que los futurólogos no se equivocan. Allí veremos, ciertamente, algunos cambios y ajustes positivos en su conducta exterior, entre ellos, una diplomacia más profesional, aunque no deben esperarse giros copernicanos. Potencia es potencia, y sustraerse de esa condición es casi imposible.  

    No obstante, en el ámbito hemisférico, aspiramos a una mayor integración económica con esa nación, independientemente de la presencia de regímenes comerciales latinoamericanos en crisis y/o estancados. La inevitable globalización nos seguirá empujando a una confluencia continental cada vez más estrecha con EEUU, de la cual no será posible escapar, a pesar del refundacionismo latinoamericano.

    No apostamos a que nuestro principal socio se derrumbe; el mundo espera mucho de la rehabilitación de su imagen, así como de su recuperación económica para la libertad, la integración y la paz en el mundo.

    Sólo deseamos que Barack Obama enfrente los retos nuevos y viejos, con inteligencia y una adecuada interpretación de los signos de los tiempos, reconociendo la  emergencia de nuevos actores y respondiendo a las expectativas con una diplomacia dialogante, sin arrogancias.

 

                              UNA EUROPA  COMPLICADA

 

2. Europa, como bloque, se encuentra también en una situación llena también de perspectivas diversas. La Unión está enfrentando fuerzas que buscan renacionalizar ciertas políticas que eran comunes. Un observador señalaba recientemente que incluso Sarkozy, como Presidente del Consejo Europeo, ha permitido un retorno con fuerza de los Estados, todo en nombre de la primacía de lo político. En diciembre pasado, A. Leparmentier decía en Le Monde: “Insensiblemente se opera una modificación de la naturaleza de la construcción europea, fundada en el derecho”.

    Esta suerte de freno a la integración político-económica, a la unidad comunitaria, puede afectar su actuación futura como actor importante y decisivo de la escena internacional, así como su performance económica, cuya competitividad se pone en cuestión permanentemente. El debate sobre el Tratado de Lisboa, sustitutivo de la fallida Constitución Europea, los efectos del ingreso de nuevos miembros de Europa Oriental, la solicitud de membresía de Turquía, la actitud no muy entusiasta de los jóvenes hacia la Unión y los problemas recientes de la dependencia energética respecto de Rusia, han generado y generarán no pocas dificultades a la marcha de los asuntos europeos.

    El experimento europeo ha sido exitoso hasta ahora, pero no está exento de problemas que van desde lo político y económico hasta lo institucional y poblacional. Ha subido el desempleo y los Estados han tenido que disponer de inmensas sumas de dinero para enfrentar la crisis financiera. Así las cosas, los retos son también enormes para esta importante región que aspira seguir siendo actor influyente en la escena internacional.

 

                                 LAS POTENCIAS EMERGENTES

                                                                                   

3. Por otro lado, Rusia, China y la India son potencias emergentes con las que debemos contar en lo sucesivo. No tienen el poderío de EEUU o de la UE, vistas individualmente, pero en coalición podrían determinar el curso de muchos asuntos internacionales. De Rusia, gobernada por una suerte de logia autoritaria, depende gran parte de Europa en la materia energética y el resurgimiento allí de sentimientos nacionalistas e imperiales es motivo de preocupación., particularmente, para los países vecinos.

    China, para algunos “la fábrica del mundo”, se ha convertido en un actor tanto económico como político de gran influencia en el mundo.  Sus ahorros, comercio e inversiones en el espacio internacional la colocan como factor decisivo de muchos de los desarrollos actuales y futuros, sobre todo, en la estabilización de la situación financiera presente.

    Otro actor a considerar y con creciente presencia mundial es también la India, “la mas grande democracia del mundo”. Una nueva visión del mundo y su modelo económico implantado en los últimos tiempos la coloca en un puesto  importante en el concierto internacional.

 

                            ORIENTE MEDIO: DRAMA INTERMINABLE

 

4. El sempiterno conflicto del Medio Oriente de nuevo es motivo de preocupaciones para el planeta. Es lamentable que las múltiples iniciativas para resolver el problema Israel-Palestinos hayan fracasado una y otra vez, y hoy no se vislumbren salidas próximas y viables a esta crisis. Las posiciones radicales se han impuesto y han impedido una solución pacífica y durable. Israel ha dado demostraciones concretas aceptando la existencia de una patria palestina retirándose de territorios ocupados. La autoridad palestina igualmente ha mostrado reiteradamente su voluntad de arreglar el conflicto.

  No obstante, movimientos fundamentalistas y terroristas como el Hamas y el Hezbolah, apoyados financieramente por Irán y Siria, desconocen a Israel y persiguen abiertamente su destrucción, torpedeando los acuerdos alcanzados. Mientras tanto, Irán sigue su carrera para ponerse con el arma nuclear, y desde Occidente, algunos alertan, como el profesor Niall Ferguson de Harvard, que allí podría estarse gestando la III Guerra Mundial. 

  Ante este panorama desolador, sólo nos queda seguir esperando que algún día se imponga la sensatez y dejen de hablar las armas, lo cual, por lo demás, no vemos en un horizonte cercano.  

 

                        NUEVOS ACTORES GLOBALES LATINOAMERICANOS

 

5. En nuestro patio hemisférico, dos países se han convertido en actores emergentes de la escena internacional con condiciones de liderazgo: Brasil y México. Políticas económicas adecuadas a los tiempos que corren, los han colocado en un sitial de significación no sólo en el continente sino también en el mundo entero. Sus sistemas políticos democráticos se han consolidado y sus economías se han fortalecido en lo interno como en la economía global.

        Ambos, a nuestro juicio, calzan los puntos para aspirar a posiciones relevantes en la institucionalidad internacional, en caso de que en ésta se logre el cambio que muchos han propuesto. Asimismo, ambos pueden contribuir a la integración de las Américas.

     En cuanto a la integración económica exclusivamente latinoamericana, vemos que el refundacionismo estéril sigue haciendo de las suyas, y no somos muy optimistas sobre su porvenir, habida cuenta de las divergencias profundas entre los países y la dinámica económica mundial que presiona hacia esquemas más globales de integración y cooperación.  Entre latinoamericanos, son esperables mejores cosas en otros ámbitos distintos al económico.

 

                                       ¿ADONDE VA VENEZUELA?

 

6. En este contexto general colmado de interrogantes, incertidumbres y expectativas que exigen respuestas globales realistas ¿cómo se sitúa Venezuela?

    La imagen y la credibilidad de nuestro país se han ido derrumbando paulatinamente en los últimos años. El cambio ideológico en las líneas fundamentales y orientaciones de nuestra política exterior, así como la diplomacia esquizofrénica adelantada, han afectado negativamente la presencia internacional del país. Los recursos financieros provenientes del petróleo se han puesto al servicio de un proyecto político personalista, anacrónico, antiglobalizador, antioccidental y sin porvenir, que tiene y tendrá consecuencias nefastas para los intereses nacionales.

    La conducta irresponsable del gobierno venezolano ha llegado al extremo de inmiscuirnos en conflictos ajenos, lo cual podría acarrearnos consecuencias graves para nuestra seguridad e intereses económicos. Ha intervenido en procesos electorales de otros países financiando gobiernos y fuerzas políticas afines, y manteniendo relaciones estrechas con grupos sindicados de terroristas por la comunidad internacional. 

   Igualmente, ha menoscabado y/o estropeado las tradicionales y cordiales relaciones políticas y económicas con naciones amigas y/o socios comerciales, como EEUU, México, Israel y otros.

   Por otro lado, en su disparatada cruzada político-ideológica, ha arremetido y torpedeado de manera absurda a las instituciones internacionales de las que somos miembros, tanto las políticas como las económicas.

   En el ámbito interno, violentando la Constitución Nacional, el gobierno ha pretendido imponer un sistema totalitario colectivista, haciendo un uso retorcido y perverso de los mecanismos democráticos para destruir la democracia.

   Burlando la voluntad popular expresada en 2007, de nuevo somete a consideración del pueblo una propuesta de reelección ilimitada, mediante un referéndum que los principios y la normativa constitucional niegan, y cuyo objetivo, señalado expresamente por el mismo Presidente, es eternizarse en el poder hasta que se consolide su revolución.  

   Este desafío a la sociedad democrática venezolana se formula en un entorno económico nacional muy oscuro: caída de los precios petroleros, actividad económica estancada, acoso y cerco a la producción privada, exportaciones no petroleras en descenso, inflación muy alta, perspectivas de aumento de impuestos y el desempleo, devaluación de la moneda, etc. 

 

 

                                HACIA UN NUEVO MULTILATERALISMO

 

7. En suma, por lo que respecta a lo internacional y de cara a las graves circunstancias, pareciera obligante el establecimiento de un nuevo multilateralismo. La coordinación efectiva de políticas e iniciativas es imperativa, no solo entre gobiernos sino también a través de la institucionalidad internacional; todo esto sin menospreciar  los datos de la realidad.   

    Es iluso pensar hoy que las decisiones cruciales del mundo sean tomadas en el marco de un debate y una votación en la Asamblea General de NNUU. No obstante, la incorporación de nuevos actores emergentes a las más altas instancias internacionales formales e informales se impone.

    Por lo pronto, es menester que sobre los asuntos más críticos y urgentes (crisis financiera, represión del terrorismo, las armas de destrucción masiva, la energía y otros) se den consensos básicos en el marco de instancias lo más inclusivas posibles.

     Asimismo, no pareciera factible a corto plazo embarcarse en una reforma, por ejemplo, del sistema financiero internacional y su regulación, dadas las características de este ámbito. Recomendable y más realista es remozar al FMI para que pueda cumplir con sus cometidos y las urgencias de hoy, amen de hacer una revisión del Convenio bancario de Basilea vigente.

     De la sabiduría y lucidez de los líderes mundiales dependerá mucho que las perspectivas sombrías actuales sean disipadas o atenuadas.

 

                            RECHAZO AL AUTORITARISMO MILITARISTA

 

     En cuanto a lo interno, a los venezolanos no nos queda sino rechazar masivamente, una vez más y todas cuantas hagan falta, las pretensiones autocráticas del gobierno en el referéndum que tendrá lugar pronto, sin olvidar el llamado a las fuerzas políticas democráticas para que presenten al país, de manera perentoria, sus propuestas programáticas.

    No basta rechazar el modelo autoritario-militarista-colectivista que quieren imponernos; es necesario y urgente contrastar con ese producto absurdo de la demencia ideológica, un modelo político-económico alternativo, hondamente democrático, que entusiasme y concite la adhesión de las mayorías. Es una tarea que no puede seguir postergándose.  

    Como se ve, tanto la agenda mundial como la nacional de 2009 lucen en extremo complicadas.

   

EMILIO NOUEL V.