Libertad!

Libertad!

sábado, 10 de enero de 2009

¿Y QUÉ ESCRIBIR?

Dudaba sobre el objeto del presente artículo al pensar lo siguiente: Rigoberto Lanz le brinda a los lectores, en la sección "A tres manos" en el periódico "El Nacional", una larga discusión teórica que hemos tenido, un grupo de amigos, a través de la plataforma de Internet. La experiencia fue interesante y bastante placentera. La gocé a plenitud. Sin embargo, me dio como vergüenza mirarme en una diatriba quizás muy exquisita, pero descoyuntada del devenir del país, aun cuando, en el fondo o en los recovecos, Venezuela estaba como excusa.
De pronto me leí, me miré a mi mismo, formando parte de un concierto surrealista… un país cayéndose a pedazos y unos teóricos debatiendo sobre libros, sus interpretaciones, cuál músicos del Titanic. Quizás, para bien o para mal, haciendo exactamente lo que la tradición platónica engendró en occidente, esto es: el oficio del intelectual es ocuparse de los asuntos trascendentes. La realidad, eso que no se sabe bien qué es, el día a día, lo cotidiano, la inmanencia, no es digna de ser pensada. Sonreí recordando aquella sentencia de Carlitos Marx, los filósofos, sociólogos y demás yerbas no hacen más que contemplar el mundo.
Estaba distraído pensando en la militancia del intelectual, en sus compromisos sociales y políticos, en la fidelidad con mis gustos, mis placeres, en cuáles eran los sentidos que yo le daba a los artículos de prensa, a lo contradictorio de la experiencia humana, cuando abrí la prensa y me encontré que el General, el militarísimo reenganchado, el primer vicepresidente del partido de gobierno, Alberto Müller Rojas, afirma que son “o unos ignorantes o unos idiotas” quien no entienda el sentido de la enmienda. La distracción pasó a un ataque de risa. ¡Es difícil escribir con seriedad sobre Venezuela! Lástima que no tengo la inteligencia del humorista quienes son los que verdaderamente atienden la inmanencia.
De pronto se me vino una pregunta: ¿Será por este desafinado autismo político y vacuidad intelectual que la memoria es tan escasa entre nosotros? Lo que permanece del gobierno, y valga un reconocimiento a sus publicistas, son sus propagandas y las locuras, que uno no sabe si es por genialidad o porque Ionesco inspira a los del PSUV. Lo cierto es que del viejo año ya no se recuerda casi nada. El caso del maletín parece un asunto de ficción de una serie del recontra espionaje, cuyo protagonista es el super agente 86 con su 99 incluida. ¿Corrupción? No, por favor, eso es un invento del imperialismo yanqui, suelen decir los amigos de la robolución. Eso es un cuento de camino. Ahora se trata de profundizar los cambios para avanzar hacia la superación del capitalismo. Una manifestación del socialismo verdadero es aquello de los cupo de divisas. Los oligarcas tendrán 250 dólares mensuales en el exterior (menos de un salario mínimo mensual) y sólo podrán tener 2.500 dólares al año. ¿Acaso quieren más? ¿Para qué? Los pobres, los millones de pobres que habitan el país no pueden viajar. Ahora tampoco la oligarquía... Es natural que el Presidente viaje, es el líder, él lo hace por amor a su pueblo, por la patria, por el universo, debe darle dos o tres vueltas más al planeta… Es importante que mande no uno sino veinte, treinta o cuarenta maletines full de dólares para los distintos gobiernos del tercer mundo con la finalidad que la revolución se internacionalice… ¿Acaso no es de esa manera que los proletarios del mundo se unirán?
Los romanos decían que un enemigo de valor dignifica. En otras palabras, la elección de la amistad y la enemistad es una decisión ética que da cuenta de los valores del sujeto. Cuando pensé en esto me dio escalofrío. Me dio una vergüenza más grande conmigo mismo, infinita con relación a la que sentía por el debate esotérico que sostenía con mis amigos. Este país da como asco. Será mejor refugiarme en la poesía de Juan Gustavo Cobo Borda.
País mal hecho
Cuya única tradición
son los errores.
Quedan anécdotas;
chistes de café
caspa y baba.
Hombres que van al cine, solos.
Mugre y parsimonia.


Jonatan Alzuru Aponte

No hay comentarios: