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Me considero de centro ,mas a la izquierda.
Pero la visctoria de Berlusconi en Italia sobre el partido y alianzas de Prodi es un fenómeno a mi juicio interesantísimo.
Italia , con su fortísima institucionalidad, es un ejemplo a seguir, o por lo menos a comprender a fondo.
Muy adecuada para referencia en asuntos municipales.
Joaquin
EDITORIAL
Su triunfo le exige responsabilidad, pero la Liga Norte no pondrá las cosas fáciles
Berlusconi no ha defraudado en su primera comparecencia de prensa. El futuro primer ministro italiano ha recurrido a los mismos tópicos de siempre sobre su eterna juventud, las bromas sobre las mujeres y los prejuicios hacia la izquierda, así como los avisos ominosos para la inmigración ilegal: cierre de fronteras y expulsión de indocumentados. Es como si el reloj se hubiera atrasado dos años, el tiempo que duró el Gobierno de centroizquierda de Prodi y que él estuvo en la oposición. Incluso muchos de los probables componentes del próximo Ejecutivo volverán a ocupar las mismas carteras ministeriales que ya desempeñaron las otras dos veces que el político y magnate de la comunicación estuvo en el poder (Frattini, Tremonti, Maroni, etcétera).
Sin embargo, no todo es igual tras los resultados electorales. Ante todo, el triunfo bastante holgado del Pueblo de la Libertad (PDL) exigirá por primera vez a Berlusconi a realizar, si es que tiene capacidad para ello, un ejercicio de responsabilidad como gobernante poniendo en marcha reformas institucionales, electorales y económicas que Italia necesita con urgencia. Esa responsabilidad debería comportar la voluntad de encontrar vías de consenso con el Partido Democrático (PD) de Walter Veltroni. Porque si algo han revelado los comicios italianos ha sido el nacimiento de un sistema bipartidista y la desaparición de los pequeños grupos, tanto a la derecha pero sobre todo a la izquierda, a los que el electorado ha castigado al decantarse por el voto útil.
El nuevo mapa político refleja también el resurgimiento de la Liga Norte de Bossi tras un periodo de larga crisis debido en parte a la precaria salud de su fundador. La Liga ha fortalecido su presencia en las principales ciudades norteñas y ha aumentado notablemente su representación en la Cámara de Diputados y el Senado. Sus excelentes resultados no son precisamente un elemento tranquilizador ni para la vida del Ejecutivo de Berlusconi ni para la estabilidad del país. El partido de Bossi demostró en el primer Gobierno de Il Cavaliere, en 1994, que fue un grupo poco fiable. Fue Bossi quien reventó entonces la coalición de centro-derecha. Pero es que, además, su ideario populista y demagógico esconde el afán de abrir una brecha económica y social entre el Norte y el Sur propugnando un federalismo fiscal que a la larga agravará más aún el desequilibrio regional italiano.
El Pais,España
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Italia
Primer ministro (2º ejercicio)
Duración del mandato: 11 de Junio de 2001 - 17 de Mayo de 2006
Nacimiento: Milán, provincia de Milán, región de Lombardía , 29 de Septiembre de 1936
Partido político: Forza Italia
Profesión: Empresario multisectorial
Crédito fotográfico: © NATO Photo
Resumen
Hijo de un directivo bancario de clase media, estudió en el Liceo Classico de San Ambroglio y en la Universidad de Milán, por la que se licenció en Derecho en 1961 con una tesis sobre la publicidad. Su habilidad para los negocios se remonta a la infancia, cuando vendía apuntes escolares a sus compañeros de aula. A los 18 años ganó su primer capital significativo como animador musical y cantante melódico en cruceros por el Mediterráneo. Con 23 años, mientras estudiaba en la universidad, puso en marcha su primera firma constructora, primer jalón de una brillante carrera empresarial.
Biografía
1. Propietario de un imperio empresarial2. Salto a la política y conquista del Gobierno nacional en 19943. Paso al liderazgo de la oposición4. Los problemas con la justicia por presunta corrupción5. Gran victoria electoral y retorno al poder en 2001 1. Propietario de un imperio empresarialFundó las empresas de construcción Cantieri Riuniti Milanesi en 1961 y Edilnord di Silvio Berlusconi & Co. en 1963, que al cabo de cinco años edificó un centro residencial en Brugherio, en las cercanías de Milán, con capacidad para 4.000 habitantes, el primero de su clase en ser equipado con todos los servicios sociales. Al frente de un equipo de jóvenes arquitectos animados con la idea una "ciudad sin coches" y él mismo fascinado por el modelo de ciudad perfecta presentado por Tomas Moro en su obra Utopía, emprendió numerosos e innovadores proyectos urbanísticos dentro y fuera del país. En 1969 levantó el barrio residencial Milán-2, con capacidad para 10.000 habitantes, y en 1973 le siguió Milán-3, para 12.000. A mediados de los años setenta desplazó sus intereses al mundo de la comunicación. En 1974 lanzó la cadena de televisión por cable Telemilano para dar servicio a Milán-2, en 1976 compró participaciones en el periódico Il Giornale, que luego adquirió, en 1978 puso en marcha Canale 5, también en Milán, y en 1983 y 1984 incorporó a su patrimonio Italia Uno y Rete 4 respectivamente. Estas cadenas, multiplicando sus emisiones a través de una red de televisiones locales y aunadas en la empresa Mediaset, pusieron fin al monopolio de la RAI y consiguieron superarla en audiencia con una parrilla centrada en concursos y otros programas de distracción. De hecho, la cuota de mercado de los dos grupos fue definido por ley, a instancias del Partido Socialista (PSI), en 1990, consagrándose en Italia un duopolio televisivo de hecho. En 1985 el Gobierno francés le concedió la primera cadena privada de ese país, La Cinq, y adquirió acciones de Chain y Cinema 5. Un año después compró los Estudios Roma y el club de fútbol A.C. Milán, del que se convirtió en presidente, y en 1988 se apropió de la mayor cadena de grandes almacenes de Italia, La Standa. Culminado su emporio mediático, el 26 de enero de 1990 obtuvo la presidencia del grupo Mondadori, editor del periódico La Repubblica y de los semanarios L´Expresso, Epoca y Panorama. Para finales de la década, cuando Berlusconi incorporó a su patrimonio la cadena de tiendas de vídeo Blockbuster, portales de acceso a Internet y una participación en Olivetti, Mondadori controlaba un tercio del sector editorial en Italia. El conglomerado Fininvest, que creó en 1975, cumplió la función de integrar sus múltiples propiedades y participaciones en televisión, prensa, edición, publicidad, seguros y servicios financieros, convirtiéndose en la tercera empresa privada del país. Para 1989 las televisiones de Fininvest concentraban, en horario de prime time, el 45% de la audiencia y el 60% de los ingresos por publicidad. A comienzos de los años noventa su patrimonio personal se estimó en superior a los 6.000 millones de dólares, colocándose como el hombre más rico de Italia. Aparte sus estrechas relaciones con el PSI, sobre Berlusconi se conjeturaron otros contactos con poderosas esferas no gubernamentales. Hasta su entrada en política no fueron publicados datos sobre su posible pertenencia a la logia masónica P2, en la cual habría tenido el carné número 1816. 2. Salto a la política y conquista del Gobierno nacional en 1994Largamente tentado a entrar en la política, el magnate de la comunicación fundó el partido Forza Italia (FI) en diciembre de 1993 y el 26 de enero de 1994 anunció su entrada oficial en la contienda preelectoral con una espectacular puesta en escena, arropada por sus televisiones y concebida por su agencia Publitalia como un producto de la mercadotecnia. El programa de FI, que Berlusconi promocionó con las dotes de un avezado showman, se basaba en la defensa a ultranza de las libertades personales y económicas y de los valores tradicionales, la reducción del paro y el déficit público ("hay que administrar al Estado como se administra una empresa o una familia"), la creación de empleo y la lucha contra la Mafia y la corrupción, frente a la que se presentó como el único líder limpio y capaz de regenerar el sistema político, diezmado por los procesos anticorrupción. Aderezó su discurso con apocalípticas advertencias contra un gobierno dominado por los ex comunistas ("si vence la izquierda volverá el estalinismo") y, como resumen de todos sus compromisos, prometió un "nuevo milagro económico italiano". De entrada, estos mensajes resultaban atractivos para el pequeño y medio empresario y los profesionales liberales, afectados por la conflictividad laboral y la presión fiscal, respectivamente. Rápidamente esbozó, tras una fracasada aproximación a las pequeñas formaciones centristas, una -aunque poco cohesionada- alianza con las fuerzas de la derecha: los neofascistas reconvertidos de Alianza Nacional (AN), las dos formaciones menores surgidas de la desintegración de la Democracia Cristiana (DC), Centro Cristiano Demócrata (CCD) y Cristianodemócratas Unidos (CDU), y la ideológicamente más ambigua Liga Norte (LN), cuyo programa separatista para las regiones norteñas tenía un componente de insumisión fiscal susceptible de acomodo con el liberalismo sin cortapisas propugnado por Berlusconi, aunque éste luego, en las tormentosas negociaciones poselectorales para el reparto de carteras, sólo prometió una imprecisa descentralización tributaria y política, advirtiendo de paso que la unidad de Italia estaba fuera de toda duda. El mensaje del conocido como Il Cavaliere, escaso en contenidos y con una elevada carga demagógica y mediática, sedujo al electorado. En los comicios del 27 y 28 de marzo de 1994 el Polo de la Libertad (PL) de Berlusconi obtuvo el 42,9% de los votos y 366 de los 630 escaños de la Cámara de Diputados, frente al 34,4% y los 213 escaños de la Alianza Progresista que encabezaba el ex comunista Partido Democrático de la Izquierda (PDS), convertido a la socialdemocracia. FI fue, a su vez, la fuerza más votada con el 21% de los sufragios y 148 escaños, uno de los cuales, obtenido por el sistema uninominal mayoritario, fue el de Berlusconi por la tercera circunscripción del distrito Lombardía 1. El sensacional éxito del empresario, con sólo unos pocos meses de experiencia política, no tenía parangón en la historia electoral de Occidente, y se remarcó su capacidad para obtener apoyos de los votantes derechistas huérfanos de la DC. El 11 de mayo Berlusconi, tras designar a tres juristas como garantes de la separación entre sus intereses empresariales y su mandato político, formó gobierno con los partidos del PL y personalidades independientes. No obstante, el primer ministro encontró desde el primer día un ambiente sumamente hostil, avivado por poderosos enemigos. El PDS, que siempre entrevió tras el desembarco político de Berlusconi su temor a una reforma de la ley sobre los medios audiovisuales a cargo de un eventual gobierno de izquierda e, incluso, una maniobra para formar parte de una clase política que había resistido sus influencias desde fuera, en una tesitura de acumulación de deudas y dificultades judiciales por sus empresas, le exigió, infructuosamente, que se desprendiera de Fininvest. También levantó una fuerte polémica el decreto-ley gubernamental del 14 de julio, que excarcelaba a todos los acusados por corrupción y negaba la prisión preventiva de los sospechosos. El mordazmente llamado "decreto salva-Craxi" -por entender algunos que Berlusconi lo que buscaba era librar de la persecución judicial al dimitido secretario general del PSI, viejo amigo de la universidad (fue padrino de dos de sus hijos) y protector en su etapa de primer ministro- recibió la desaprobación popular y el Gobierno hubo de corregirlo en un sentido más restrictivo y someterlo al Parlamento como proyecto de ley. Las investigaciones judiciales de altos directivos de Fininvest acusados de corrupción (incluido el hermano menor de Berlusconi, Paolo, accionista mayoritario del grupo, que conoció una breve estancia carcelaria con carácter cautelar semanas antes de las elecciones y luego anduvo prófugo hasta entregarse a la justicia), más la huelga general del 14 de octubre convocada por los sindicatos contra la gestión económica de su Gobierno, en especial la reforma del sistema de pensiones, se tradujeron en una substancial pérdida del apoyo electoral de FI en las elecciones regionales y municipales del 21 de noviembre. Al día siguiente se confirmó, tras varias semanas de insistentes rumores, que la justicia le había enviado a Berlusconi una citación como presunto cómplice en un delito de corrupción a funcionario público, consistente en el pago de dos sobornos por valor de 300 millones de liras a miembros de la policía fiscal. Este cúmulo de adversidades se producía pese a todos los intentos de Berlusconi de desvincularse formalmente de su imagen empresarial, el último el 29 de julio con el anuncio de la dejación de sus intereses económicos en manos de un gestor de confianza, mientras un "comité de vigilancia y garantía" supervisaría en nombre del presidente de la República y el Parlamento los eventuales conflictos de intereses que pudieran surgir. La agitación política permanente y la atención de intereses extrapolíticos, disminuyó la capacidad de su Gobierno para acometer medidas firmes contra el desequilibrio de las finanzas públicas, lo que generó desconfianza en los mercados financieros internacionales, provocando el desplome de la lira y la bolsa, y la huida de los inversores extranjeros. Además, el desempleo experimentó un repunte y afectó al 12% de la población activa. Las relaciones en el seno del Gobierno con la LN de Umberto Bossi, siempre difíciles (en buena parte debido a la mutua animadversión entre él y el presidente de AN, Gianfranco Fini), estallaron cuando el impredecible dirigente lombardo retiró su apoyo a la coalición, precipitando la dimisión de Berlusconi el 22 de diciembre de 1994. Su caída cuestionó las esperanzas de normalización de la vida política, tras tres años de convulsiones por los escándalos de corrupción y seis meses después de la inauguración oficiosa de la denominada II República. El 13 de enero de 1995 el presidente Oscar Luigi Scalfaro, desoyendo las exigencias de Berlusconi de que le permitiera someter su candidatura al Parlamento y que en caso adverso convocase elecciones, pidió al independiente Lamberto Dini que formara un gobierno de técnicos. En su efímero mandato Berlusconi se reunió con el presidente estadounidense Bill Clinton (2 de junio), el canciller alemán Helmut Kohl (16 de junio) y el presidente francés François Mitterrand (16 de diciembre), y fue el anfitrión de la 20ª Cumbre del G-7 en Nápoles (8 a 10 de julio). No obstante, la presencia de los neofascistas de AN en el Gobierno más la propia condición empresarial de Berlusconi, vistos con prevención (cuando no con patente desagrado) por buena parte de los socios internacionales de Italia, afectaron indudablemente la normalidad de la relaciones exteriores. 3. Paso al liderazgo de la oposiciónEn las legislativas del 21 de abril de 1996 el PL (descontando la LN) cayó a los 246 escaños con el 42,1% de los votos computados en el sistema proporcional. FI obtuvo 123 escaños y el 20,6% de los sufragios, desgaste moderado que fue esgrimido por Berlusconi para denunciar su derribo parlamentario como ajeno a sus verdaderos apoyos en las urnas, aunque en vez de centrar sus críticas en la LN arremetió contra el PDS y sus presuntos colaboradores en la judicatura, la prensa y la intelectualidad.
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Enviado por Sophy
1 comentario:
Por conocer bien la situacion de Italia hay k vivir aca.
El gobierno berlusconi fue el unico gobierno de la historia de la Republica Italiano a completar su mandato. Los de la izquierda italiana vienen de los partidos democrazia italina y partido comunista k fueron los k se dividieron la torta despues de la segunda guerra mundial. Esos politicos siguieron comiendo como buitres hasta dejarnos con un deficit digno de un pais africano!
Dicho esto creo k Berlusconi no sea un santo y tenga sus cadaveres en el armario como todos los "buenos" politicos, pero con el, porfin Italia se mueve y sale de su inmovilidad desde la caida de la primera republica.
La gente esta canzada de los caruseles de gobierno y eleciones pide algo seguro hasta con los emigrantes. Personalmente conozco extranjero viviendo en Italia indocumentados, a los cuales les ocuparon kilos de cocaina k a los 5 meses ya estaban sueltos circulando en el pais en espera del proceso. Al final los condanaron a 5 anos menos los 4 meses pasado menos el descuento por primera vez ......despues 4 meses mas de carcel le dieron un permiso para trabajar y alojar en su casa.
Estamos llenos y artos de estos personajes k nos complicana la vida.
Si un italiano comete un crimen en latino america despues de la prision le dan una patada para su pais y jamas podra volver. Porque nosotros no podemos hacer igual?
Los k no viven en Italia no pueden imaginar lo k es estar bajo el poder de los delincuentes de otro paises es como ser esclavos en propia casa!
Con cordialidad
Lucas
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