NOTA DE PRENSA DEL GRUPO LA COLINA (NOV. 2007):
El Grupo La Colina AC, ante el cambio fraudulento de la Constitución, afirma que la conducta política más eficaz y cónsona con los valores de libertad y democracia que los inspiran, es ir a votar NO en el eventual caso de que el referéndum convocado por el CNE se de en la fecha anunciada.
Por otro lado, sus miembros sostienen que si los poderes institucionales del país funcionaran independientemente, deberían suspender el referéndum mediante le cual se pretende aprobar una nueva Constitución,
“Independientemente de lo que pueda ocurrir con las legítimas acciones políticas y legales que intenten las distintas organizaciones políticas, personalidades y organizaciones de la sociedad civil para impedir que tenga lugar tal acto refrendario, las cuales apoyamos, el Grupo La Colina juzga que concurrir a votar NO es la acción más conveniente y eficaz.”
“vale la pena ir a votar NO, por cuento existen sobradas evidencias de que la mayoría de los venezolanos rechazan el cambio constitucional propuesto, lo cual se refleja en las encuestas y se palpa en la calle.
“El GLC considera que en las circunstancias presentes no hay razones políticas de peso para no participar en el proceso, a pesar del ventajismo obsceno que exhiben los proponentes de la mal llamada reforma y de la parcialidad y actitud complaciente de los poderes públicos, incluido el Consejo Nacional Electoral.”
“Pensamos que es posible con la movilización masiva de los venezolanos que repudian el cambio constitucional, derrotar las perversas intenciones de establecer en Venezuela un régimen totalitario militarista y colectivista”.
“Los ciudadanos de este país tienen mucho que perder si se aprueban las propuestas en discusión. No sólo en materia de derechos humanos fundamentales, sino también en las conquistas sociales y económicas, en su vida diaria, en sus empleos, en sus sueldos y en las relaciones de convivencia armónica y pacífica con sus semejantes”.
Sigue el GLC: “Estamos conscientes de las distintas y respetables opiniones que hay respecto de concurrir o no a votar en este proceso, y las respetamos. Sin embargo, hacemos un llamado a la reflexión sobre cual es la conducta más eficaz en la larga lucha que debemos llevar para impedir la entronización definitiva de un tirano poseído de una demencia ideológica que persigue absurdamente colocar al país en el sendero tenebroso del totalitarismo.”
“No escapan a nosotros los problemas e irregularidades presentes en el sistema electoral venezolano, que hacen dudar con razón de su confiabilidad. Hemos hecho esfuerzos por conocerlo a fondo, no desde las oficinas de la academia, sino desde adentro y en la práctica, con el propósito de detectar sus deficiencias, sus puntos débiles y su potencialidad para el fraude. Gracias a ese conocimiento hemos podido contribuir al logro de avances y conquistas que han hecho menos inseguro y más transparente el sistema. Obviamente, faltan todavía muchas cosas por lograr.
No obstante, y sin que estemos dando una certificación de garantía, ni mucho menos un visto bueno, podemos afirmar, de conformidad al criterio de nuestros mejores técnicos, que si los que repudiamos la “reforma” hacemos un adecuado trabajo de movilización y organización, colocando testigos en todas las mesas de votación, y dotándose de un sistema de información, el fraude, que fundamentalmente se produce en las propias mesas, podrá impedirse, minimizarse o en su defecto, controlarse posteriormente.”
La Colina igualmente señala: “Ya es hora de que desechemos el simplismo y los mitos que se han tejido en torno a lo electoral y su sistema, los cuales favorecen la intención del gobierno de alimentar la abstención. Sin embargo, para nuestra organización lo que se debe subrayar es que más que un asunto jurídico-constitucional o moral, que también lo es, sin duda, estamos ante un problema eminentemente político, y así debe ser abordado y manejado. Hoy pareciera que el principismo, las pasiones y el inmediatismo no son los mejores consejeros, de cara a un gravísimo problema político como el que nos agobia y que podría cambiar nuestras vidas.”
El GLC agrega asimismo: “En las circunstancias actuales, cambiantes por cierto, a diario, el GLC considera que la conducta más conveniente a los intereses democráticos, a sus distintas organizaciones y a los venezolanos que aman la libertad, es prepararse para enfrentar el reto de ir a votar NO y defenderlo resuelta y valientemente en las urnas electorales. Si bien existen muchas otras formas de hacerlo, el repudio al cambio constitucional fraudulento planteado debe expresarse también y primordialmente mediante el arma democrática por excelencia: el voto.”
Finalmente, el GLC exhorta a “los venezolanos de todas las condiciones sociales que repudiamos el cambio constitucional, para que asuman con responsabilidad y optimismo el reto que tienen enfrente. Porque en esta oportunidad, que no es la última batalla, pero sí una de las más serias, se juega sus empleos, sus negocios pequeños y grandes, el destino libre de sus hijos, el bienestar económico de la familia, la participación de la provincia en las decisiones que la afectan, la carrera militar como profesión y, en fin, la paz y la tranquilidad de todos.”
Por el Grupo La Colina
Coordinador:Emilio Nouel
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