Erradicar el disenso

Stalin González //

¿Será casualidad o este régimen quiere acabar con la disidencia de manera burda?
Desde hace ya un año, mi compañero de lucha Nixon Moreno está en la Nunciatura Apostólica solicitando asilo diplomático porque este Gobierno practica tácticas fascistas con sus adversarios. Una de esas prácticas es repetir una mentira para convertirla en verdad. Eso han pretendido hacer en el caso de Nixon.
La nueva elite que gobierna acusa de agente de la CIA a cuanto dirigente o expresión que disienta; y, por si fuera poco, criminaliza la protesta. Ahora resulta que quien denuncie irregularidades administrativas es un "traidor"; quien reclame derechos es parte de un plan del "Imperio"; quien exija que haya elecciones en la FCU de la ULA, es acusado de actos lascivos; los estudiantes que quieren un país para todos son "niños ricos" (si fuese cierto, entonces somos el país con más ricos en el mundo); los obreros que exigen mejoras salariales y de seguridad social son "germen de la IV República". Quien tenga una discrepancia a lo interno es un "infiltrado por los paramilitares".
Ahora, todo dirigente que crea en un cambio para este país es inhabilitado ilegalmente por el Contralor. ¿Será casualidad o este régimen quiere acabar con la disidencia de manera burda? En vez de convencer al pueblo de que su proyecto es el mejor, prefieren aplacar toda amenaza de disidencia con vericuetos administrativos y judiciales. No terminan de entender que hoy mucha gente reflexiona sobre quiénes son los traidores: ellos, que estafaron las esperanzas de cambio de este maravilloso pueblo; ellos, que profundizan los vicios de la IV República y se alejan cada vez más de la gente. En este panorama, la vía es la participación en los espacios sociales, trabajar por organizarnos y enfrentar al fascismo-militarista que encabeza la elite de turno para lograr así una verdadera transformación, que implique el respeto y el reconocimiento del otro.

Dirigente estudiantil
ivanstalin@movistar.ve.blackberry.com El Universal