Juan Röhl
Pequeñas Historias
Cuando el Conde de Aranda fue a Prusia por orden del rey don Carlos III de España para estudiar y tratar de aplicar la táctica militar prusiana al ejército español, tuvo la enorme sorpresa de que el rey Federico II, el Grande, le informara que dicha táctica estaba basada en un libro español titulado “Consideraciones Militares”, escrito por el Marqués de Santa Cruz de Marcenado.
Quinientas y una Pequeñas historias, de Juan Röhl .Editorial Monte Avila. Caracas.1971, p. 38.
Apéndice*
1º El Conde de Aranda. De los ministros españoles del reinado de Carlos III, la figura más destacada fue don Pedro Abarca y Bolea, décimo conde de Aranda (1719-1798). Discurrió su juventud en los campos de batalla, a los 44 años era ascendido a capitán general, y en 1766 mandaba la Capitanía de Valencia. A la caída de Esquilache, Carlos III le trajo a la Corte como presidente del Consejo de Castilla. La más sonada y criticada de sus medidas fue la expulsión de los jesuitas, que Carlos III firmó el 27 de febrero de 1767.
Bibliografía.
Historia de España. Editorial Ramón Sopena, S. A. Barcelona. España. 1994, p. 347.
2º Carlos III (1716-1788), Rey de España entre 1759-1788. Sucedió a su hermano de padre Fernando VI. “Fue el mejor y más inteligente de los príncipes de la Casa de Borbón”.
Bibliografía.
Historia de España. Editorial Ramón Sopena, S. A. España. 1994, p. 344.
3º Federico II de Prusia (1712-1786), que por sus empresas militares y políticas mereció el sobrenombre de “el Grande”, ocupo el trono en 1740. Su carácter templado por la severidad excesiva de su padre, le había permitido desarrollar unas sólidas dotes de gobierno, gracias también a la experiencia militar y administrativa que adquirió durante los años anteriores a su coronación.
Bibliografía.
Historia Universal. Tomo 8.Editorial Planeta. Colección de El Nacional, p. 221.
4º Marqués de Santa Cruz de Marcenado. Álvaro Navia-Osorio y Vigil de Quiñones (1684-1732), vizconde de Puerto y marqués de Santa Cruz de Marcenado, autor de unas célebres «Reflexiones militares», fue el tratadista militar más importante de su tiempo, además de ser militar en ejercicio que conocía muy bien el olor a pólvora y el ajetreo de los campos de batalla; y por si fuera poco, diplomático, economista y hombre de general atención intelectual, como lo certifica su proyecto de redactar un «Diccionario Universal» a modo de Enciclopedia, con el que, de haberlo llevado a término, se hubiera adelantado a la monumental obra de Diderot y D'Alembert y al «Diccionario de la lengua inglesa» de Johnson. Según Fuertes Acevedo, era «valiente en el combate e ilustradísimo en las cosas de la política y la guerra (y) alcanzó para su patria victorias insignes, que elevaron a la par el nombre de este eminente asturiano a gran altura; escritor profundo y señalado, sus obras dieron al valeroso Santa Cruz la más extendida fama, siendo las "Reflexiones militares" miradas por el gran Federico de Prusia como escrito del mayor valor y tenidas por Napoleón en el más grande aprecio».
Como tratadista militar, se considera la obra del marqués de Santa Cruz de Marcenado antecedente directo del tratado sobre la guerra de Von Clausewicz. Es conocida la anécdota de que, siendo el Ejército de Prusia el más moderno y mejor disciplinado de Europa, partió una delegación española hacia Postdam, para que allí les proporcionaran las directrices de aquella excelente organización militar. Una vez más los españoles dieron prueba de su aldeanismo, queriendo encontrar en Europa lo que tenían en casa; pues el rey Federico, al escuchar la pretensión, les contestó: ¿Y ustedes me lo preguntan, siendo españoles? Todo lo que sé sobre ejércitos lo aprendí leyendo a un compatriota suyo, al marqués de Santa Cruz de Marcenado».
Trabajo sobre el Marquéz de Santa Cruz de Marcenado realizado por José Ignacio Gracia Noriega. La Nueva España · 18 de agosto de 2005.
*Como material de apoyo en algunas historias de Juan Röhl he considerado conveniente elaborar un apéndice con notas relacionadas con los sucesos o personajes que cita el autor.
Elaborado por Gerónimo Alberto Yerena Cabrera para la sección de Historietas del Blog Venezuela Libre.
yerena.gerónimo@gmail.com
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